Los pensionados duermen en las aceras alrededor del Banco Bicentenario con la esperanza de obtener su tarjeta de débito al día siguiente. | Foto: cortesía pensionados
Barquisimeto.- Pensionados del Banco Bicentenario en el estado Lara comenzaron a hacer cola desde el mediodía del domingo 9 de agosto alrededor de la sede principal, ubicada en la avenida Venezuela de Barquisimeto, para solicitar la tarjeta de débito y así poder cobrar su mensualidad, retenida en algunos casos desde hace ocho meses, según informaron a El Pitazo.
Hasta siete veces han tenido que dormir en la calle con la esperanza de obtener el plástico. Sin embargo, no logran hacerlo porque además están rodeados de grupos que se han apoderado de las listas y cobran por dejar entrar a unos, mientras que quienes no tienen para el soborno siguen en interminable espera.
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Los 150 adultos mayores que estaban en horas de la noche del domingo, sentados en las aceras o durmiendo sobre cartones, contaron que existe un grupo de personas que “hacen las listas”, así, entrecomillado, porque la realidad es que engañan a los pensionados, y al día siguiente, quienes pasan al banco son quienes han desembolsillado cinco dólares a estos mismos «organizadores».
Esta modalidad se ha repetido desde que empezaron a laborar las entidades bancarias, durante las semanas de flexibilización.
“Yo el viernes pasado quedé con el número 28 y hoy, cuando llego, hay otra lista y estoy de número 215; esto se ha vuelto un negocio. Ya he venido cinco semanas y no he podido tener mi tarjeta; esto es un comercio”, insistió con tono agridulce uno de los pensionados que prefirió reservar su nombre, por temor a los propios organizadores y hacedores de listas.
El problema se agrava con la concentración de adultos mayores en plena calle, a merced de la inseguridad y de las lluvias. No cuentan con ningún tipo de protección para evitar el contagio del COVID-19, algo que es más preocupante porque están en el rango de riesgo de complicaciones en caso de salir positivos a este virus.
“He hecho cuatro viajes. Vivo en el barrio La Paz. No vengo por el efectivo, porque no lo están dando, sino por la tarjeta. Tengo ocho meses sin poder cobrar la pensión. Aquí trabajan de nueve a una; a veces se va la luz», contó José Aldazoro.
Gladys García Terán también vive en el oeste de la ciudad, al otro extremo de dónde está ubicada la sede del Bicentenario. Comentó que ha realizado siete visitas al banco y nada, porque se acaba el material o se quedan sin sistema.
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Gilberto Peraza hizo el mismo reclamo. Ha viajado cinco veces desde el norte al este de Barquisimeto con la esperanza de obtener su tarjeta de débito y así poder hacer sus transacciones bancarias.
“Sí le tengo miedo al coronavirus, pero aquí cumplimos con el distanciamiento”, dijo, aunque la realidad que se observaba era otra.
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