En la comunidad son nueve viviendas afectadas de forma directa por el socavamiento del terreno. | Foto: Cortesía vecinos
Un estruendo sintió la señora Mirian Torrealba en el mes de octubre del año 2020, cuando el piso de uno de sus cuartos cedió. Desde ese momento vive con un gran hueco de aguas negras dentro de su vivienda, producto del colapso de cloacas en el sector, situación que fue reportada a Hidrolara desde ese momento, pero hasta la fecha, no ha sido solucionado.
La señora Mirian vive con cuatro menores de edad. En noviembre, después de la primera visita de Hidrolara, funcionarios del cuerpo de Bomberos del municipio Iribarren hicieron una inspección y le notificaron que debía desalojar la vivienda por el riesgo de derrumbe.
“Para dónde me voy, no tengo otra casa”, dijo la señora Mirian en el mes de abril, la última vez que fueron recibidos en Hidrolara.
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Desde la hidrológica les dijeron a los vecinos que debía ir el topógrafo de la empresa estatal para estudiar la situación. Entre todos tuvieron que buscar la gasolina para que el especialista pudiera trasladarse, en dos ocasiones.
“En la última reunión que tuvimos con la ingeniera Sabrina [Salvatrice], nos dijo que eso era fácil, pero han pasado tres meses y no han vuelto”, dijo Alida Arenas, habitante de José Félix Ribas.
El colapso ha empeorado y al menos nueve casas, hasta ahora, están afectadas de forma directa por el socavamiento del terreno, lo que constituye un grave riesgo para las vidas de las personas que viven allí. En total, son casi 50 viviendas que pueden ceder si no reparan el colapso de las cloacas.
Alida Arenas, vecina, mencionó que la humedad se siente en las calles de la comunidad y tres bocas de visita están desbordadas, además, dijo que un poste de luz tiene su base corroída y está a punto de caer sobre otra vivienda.
“Eso fue notificado a Corpoelec, pero no han venido. Lo único que dijeron es que si se caía, los tabacos se apagan de inmediato, porque ese poste está pegado a dos transformadores. Pero ¿quién le va a pagar los daños que ocurran en la casa donde va a caer?”, se preguntó la señora Arenas.
Además de eso, la calle del principal colapso carece del sistema de alumbrado. Todo está oscuro, según indicaron los vecinos, quienes esperan tener una pronta solución antes de que ocurra una tragedia.
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