Habitantes del municipio denuncian que mientras decretan toque de queda en Guajira, los venezolanos retornados están en una carpa de los militares frente a la iglesia. Foto: Eira González
Mas hambre y sed traerá el toque de queda que decretó el Gobierno para el municipio Guajira. En esto coinciden los habitantes que reaccionaron a la decisión de que no haya nadie en las calles desde las cuatro de la tarde hasta las diez de la mañana del día siguiente. Así lo declararon este 20 de mayo.
Apuntan los residentes que este será el primer efecto. La situación podría agravarse por la falta de transporte público debido a la falta de combustible y por la falta de señal telefónica. A este panorama hay que agregar que en los centros de salud no hay medicamentos.
En el inicio del toque de queda, funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) retuvieron bicicletas, motos y camiones. Quienes estuvieron en estas tareas les dijeron a los dueños de los vehículos que quien no estuviera de acuerdo con la medida, fuera a Miraflores a quejarse con Maduro.
En el municipio Guajira manifestaron que las medidas tomadas por el gobierno de Nicolás Maduro afectarán a las personas que salen a las cinco de la mañana a buscar comida para sus hijos. Esperar hasta las diez de la mañana solo les generará dificultades.
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“Considero que es una locura. ¿Cómo harán las personas para poder comprar alimentos? Muchos de nosotros nos levantamos muy tempranito para comenzar a caminar antes de que el sol caliente para poder comer en el día a día”, afirmó Bladimiro Guerrero, habitante de Sinamaica.
Guerrero destacó que a eso se le une que no a todos los habitantes de Guajira les llega la comida del Gobierno. “Los demás nos moriremos de hambre. Los alimentos que deben ser regulados, aquí en Guajira se venden a precios excesivos”, añadió.
A juicio de Jairo Gil, habitante de Paraguaipoa, el toque de queda no tiene justificación ni lógica. Denunció que los venezolanos que retornan al país “se encuentran tirados en una carpa militar frente a la iglesia San José sin ninguna medida preventiva” y se pregunta: “¿El coronavirus viaja de cuatro de la tarde hasta las diez de la mañana?”.
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Por su parte, Nidia Sánchez, habitante de Guajira, pidió oración por el pueblo que está pasando por situaciones muy críticas para todos. “Nos cercenan los medios de comunicación y no tenemos trabajo. Solo pido mucha oración porque le vendrán cosas más feas a este pueblo wayuu”, exclamó.
A su vez, Yudith Ríos, habitante de Sinamaica, dijo que “el anuncio de Maduro tiene al pueblo secuestrado por la falta de combustible, que es el problema que se vive en todos los estados del país”.
En conjunto piden que se flexibilice el horario del toque de queda en el municipio para solventar necesidades de alimentación y agua en Guajira.
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