En la calle Libertad con Campo Elías de Pueblo Nuevo del sector Las Mercedes -centro de Coro-, los vecinos temen que sus familias se enfermen y que sus viviendas se derrumben ante los caudales de aguas residuales que circulan en la zona.
Luis José Betancourt, habitante de la zona describió la situación como decadente y preocupante, asegurando que niños y abuelos sufren de enfermedades respiratorias y las paredes de las casas están agrietadas por lo que les preocupa que se desplomen en cualquier momento, pues los focos de aguas servidas están frente y dentro de sus hogares.
Carlos Cuenca, destacó: «Las enfermedades no nos permiten vivir en paz, estamos entre aguas negras y contaminación, corremos peligros desde los niños hasta los ancianos, hacemos un llamado de conciencia al gobernador, al alcalde».
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Aseguró el afectado que no existen líderes de las fuerzas populares como consejos comunales o Ubch, que busquen la solución ante la problemática, lo que agudiza su gestión con las autoridades competentes. Semana a semana, son más las comunidades que se suman a denunciar los riesgos que experimentan, tras vivir inundados de aguas negras en la capital del estado Falcón.
En la calle La Paz con calles Sucre y Girardot, en el oeste de la capital política de Falcón hay personas que sufren enfermedades respiratorias producidas por aguas servidas que ya tienen más de un año sin haber sido atendidas por la hidrológica.
Estas comunidades manifestaron estar cansadas de hacer llamados de atención a las autoridades locales, para que se avoquen a reparar las tuberías de aguas residuales, organicen la limpieza y recolección de desechos sólidos y asfalten las calles que tienen grandes huecos.
