En las ocho estaciones de servicio en Colón reportan colas | Foto: Edwin Urdaneta
Las estaciones de servicio en Maracaibo y San Francisco amanecieron con largas colas de vehículos este miércoles, 3 de junio. Pero no en todas llegó la gasolina, a las 12 del mediodía debieron cerrar sus puertas para cumplir con las medidas de la cuarentena ordenadas por el gobernador de Zulia, Omar Prieto.
Mientras, en las bombas donde hubo gasolina subsidiada se registraron distorsiones con el cobro y con el regreso de las llamadas colas VIP, que es como califican los usuarios a las filas preferenciales que hacen en las estaciones y a las que los gasolineros, encargados y militares privilegian con el surtido del combustible.
En las estaciones a quienes estaban en las colas VIP les cobraron por llenarles el tanque completo y no la cuota de 30 litros por vehículo que ordenaron las autoridades en la región.
En la estación LagoLuz, en las adyacencias de la Facultad de Humanidades de la Universidad del Zulia, los bomberos cobraron 1 dólar y 50.000 bolívares en efectivo para surtir más de los 30 litros anunciados por el gobierno de Nicolás Maduro.
En una estación de servicio, al final de la avenida La Limpia, los trabajadores cobraron cinco dólares a los usuarios que no querían hacer cola.
«Seguimos en lo mismo. Pasan primero las marañas, los que pagan», denunció Omar González, quien no pudo surtir este miércoles, 3 de junio, en la bomba LagoLuz.
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Cientos de usuarios hicieron la cola en vano. En algunas estaciones no llegó el combustible antes de las 12 del mediodía -hora permitida para vender-, como en Los Aceitunos, La Curva, La Floresta y Panamericano en la avenida La Limpia, y El Turf y El Derbi en Circunvalación 2.
Hubo otras estaciones, como Irazuza en el sector Cecilio Acosta y Fátima en el sector 18 de Octubre, donde la gandola de Pdvsa llegó a las 11:00 am y los dueños de la gasolinera decidieron dejar la venta para el jueves, 4 de junio.
“Es lo que vengo diciendo, hubo gente que llegó a las dos de la madrugada y todos quedaron ponchados en Irazuca. Tengo mucha impotencia. Las dolarizadas trabajan perfecto y les llega la gandola. Sinvergüenzas, estafadores”, se quejó Andrés Jiménez, uno de los usuarios.
“Es una gran estafa. Un engaño más para el pueblo. En las bombas dolarizadas no hay problema, llegan las gandolas temprano. Si en verdad las estaciones las surtieran temprano, a lo mejor daría chance. Pero así no. O restringen la venta de gasolina por la pandemia o terminen de dolarizar. No tienen consideración con la gente”, reclamó otro usuario que no dio su nombre.
Las fallas en el sistema del llenadero Bajo Grande mantienen el retraso en el despacho, según confirmaron fuentes de Petróleos de Venezuela. La prioridad en la distribución la tienen las 24 estaciones de servicio que venden la gasolina a precio internacional (5 dólares), indicó una fuente.
Las estaciones premium también se mantuvieron con largas colas de vehículos. En la gasolinera Lago Pista, ubicada en la Circunvalación 1, la fila de vehículos alcanzaba un kilómetro de distancia. A las 12 del mediodía cerró pese a que usuarios permanecían en cola.
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Desde las 4:30 am de este miércoles, 3 de junio, hubo conductores en cola en las afueras de estaciones de servicio de los municipios de la Costa Oriental del Lago. Hay filas de carros kilométricas, tanto en las estaciones de servicio que esperan despacho, como en las que están funcionando.
Desespero y caos hay en Cabimas y Ciudad Ojeda. Los funcionarios de la Guardia Nacional, quienes controlan el ingreso, piden a los conductores que se mantengan dentro de los vehículos y exigen el uso de tapabocas. Miriam Gómez, tiene seis horas en cola y tiene el número 140.
En las estaciones de servicio que venden gasolina subsidiada continúan sin llegar los equipos de sistema de biopago, por lo que solo pueden pagar en efectivo en bolívares.
José Morles, miembro del Sindicato de Transportistas de la COL, pidió a las autoridades que les asignen una estación de servicio a los choferes de transporte público para poder surtir y prestar servicio en las rutas urbanas y suburbanas de la zona.
«Por el número de placa hay conductores que no han podido surtir y otros que, aunque hicieron la cola, la gandola no llegó el martes. Necesitamos respuesta, la mayoría de los choferes son el único ingreso económico de su familia».
Durante el tercer día habilitado para surtir gasolina, los municipios Jesús María Semprúm y Sucre no han vendido combustible, confirmaron pobladores de estas zonas.
En la estación de servicio de Casigua El Cubo, en la frontera con Colombia, nadie ha podido llenar su tanque. La zona está en toque de queda por decreto de las autoridades gubernamentales ante el aumento de contagios del COVID-19.
Pero en la zona llega combustible colombiano dijeron habitantes del lugar. Comentaron que les venden el litro en 3.500 pesos, el equivalente a 200.000 bolívares, o al precio de un dólar en el mercado paralelo.
En Caja Seca, municipio Sucre, los transportistas públicos, particulares y motorizados llevan dos días esperando que abran sus puertas la estación de servicio El Toro, ubicada en la parroquia Rómulo Gallegos. Otras dos estaciones en Sucre no tienen carburante para el público en general.
En el municipio Colón hubo cola en las ocho estaciones de servicio que tienen despacho al público. El pago se mantiene en efectivo a razón de 30 litros por carro y 10 litros por moto.
Luiner Urdaneta, director de tecnología de la Alcaldía de Colón, informó que las estaciones cuentan con sistema biopago, pero aclaró que junto a personal de Cantv trabajan para que las 16 máquinas habilitadas tengan conexión a internet ABA. Se instalaron dos por estación.
En Catatumbo la estación de servicio Miraflores, que se ubica en Encontrados, es la única de la subregión donde comenzó el despacho de carburante a un costo de medio dólar por litro de combustible.
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Los habitantes del municipio Machiques amanecieron en cola para surtir gasolina, pero no todas tienen combustible. De hecho, hay estaciones cerradas.
En la parroquia Libertad, de los cuatros estaciones de servicios que hay, solo están abiertas las que venden la gasolina en dólares. En estas también funciona el sistema biopago y pueden cancelar con divisas o bolívares en efectivo.
Mientras, las estaciones que están destinadas a vender gasolina subsidiada permanecen cerradas por falta de gasolina. Las otras abrieron con retraso a la espera de la gandola.
Usuarios denunciaron que los dueños de las gasolineras aseguraron que el combustible se acabó desde el martes, 2 de junio. “La estación de servicio La Sierra trabajó hasta las siete de la noche, aun así, quedaron carros sin surtir. Simplemente nos dijeron la gasolina se acabó y cerraron”, puntualizó Dinora Prieto, usuaria de la zona.
En la parroquia San José, la venta de combustible arrancó este miércoles, 3 de junio, usuarios de las dos estaciones de servicios llevaban dos días en cola a la espera de tanquear sus vehículos.
Con información de Sheyla Urdaneta, Nataly Angulo, Mayteth Casanova, Edwin Urdaneta y Johandry Montiel
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