Monseñor Mariano Parra Sandoval ofició la solemne eucaristía del Domingo de Ramos en la catedral de Coro, sin la presencia de los fieles católicos. Foto: Cortesía Prensa Arquidiócesis
El Arzobispo Metropolitano de Coro, monseñor Mariano José Parra Sandoval, presidió el 5 de abril la solemne eucaristía con motivo del Domingo de Ramos, en ausencia de de fieles, desde la Basílica Menor de Coro.
Debido a la cuarentena nacional, decretada el 17 de marzo, las reuniones religiosas están suspendidas, por esa razón, los medios de comunicación arquidiocesanos transmitieron la misa en vivo, para que así la feligresía la viviera desde sus hogares.
Monseñor Parra expresó durante su homilía que las escrituras bíblicas están cada día más vigentes, porque Cristo sigue condenado a muerte al observar a los marginados y crucificados de hoy. Puntualizó que Jesús es el único que salvará al mundo de esta tempestad.
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La eucaristía fue concelebrada por el párroco de la catedral Robert Medina, y los sacerdotes del Seminario San Ignacio de Antioquia.
Con el Domingo de Ramos se dio comienzo a las celebraciones litúrgicas de Semana Santa, las cuáles serán transmitidas por los medios de comunicación con el objetivo de fomentar que los fieles permanezcan en casa, para cumplir con las medidas preventivas contra el COVID-19 y unidos en la oración.
La juventud católica también participó en la eucaristía, con motivo a la celebración de la XXXV Jornada Mundial de la Juventud, una iniciativa de San Juan Pablo II. Monseñor Parra Sandoval les ofreció un mensaje de esperanza y aliento a los jóvenes de Venezuela y el mundo, a quienes instó a ser portadores de la esperanza, en estos tiempos de dificultad y a mantener la fe en Dios.
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