Algunos venezolanos reciben ayuda en centros de atención temporal. Foto cortesía La Hora
Caracas.- Cada mes ingresan al menos 12.000 venezolanos a Tulcán, Ecuador, con el fin de continuar desplazándose hacia el sur del continente, por lo general utilizando vías irregulares, según registra la Organización Internacional de Migrantes, reseña El Universo el miércoles 9 de junio.
La nota del medio digital ecuatoriano apunta que, de acuerdo con la organización, los venezolanos llegan a la zona fronteriza de Ecuador desde Colombia, y por lo general son muy pocos los que deciden quedarse en Tulcán, debido al clima frío y las pocas oportunidades de trabajo. No se reporta desde cuándo se registran estos ingresos.
Santiago Cabrera, exrepresentante de Cooperación Internacional en la municipalidad local, explicó que los venezolanos que llegan a la zona fronteriza permanecen un máximo de cinco días buscando recomponerse físicamente y reuniendo dinero por medio de la mendicidad; un hecho que ha ocasionado que Tulcán se conozca como la ciudad del descanso.
Algunos venezolanos reciben ayuda en centros de atención temporal administrados por el Municipio de Tulcán de la mano de algunas ONG y en casos excepcionales reciben hospedaje en hoteles y hostales.
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Las autoridades ecuatorianas crearon un corredor humanitario la Panamericana E 35, desde El Barrial hasta la parroquia de Julio Andrade en donde se les atendía mientras se movilizaban. Esta decisión se tomó con el proposito de que los desplazados no ingresaran a los centros poblados y que continuaran a sus destinos.
Cristian Benavides, alcalde y presidente del COE cantonal, explicó que cuando llegan los venezolanos a la ciudad fronteriza, entre ellos niños y personas de la tercera edad, y se ubican en parques y espacios públicos, generan varios inconvenientes que mantiene en zozobra a la población.
Benavides aclaró que no están en contra de movilidad humana, sino que la mesa de seguridad del COE tomó en cuenta este clamor de la ciudadanía, que viene de algunos meses atrás. Las autoridades del COE de Tulcán explicaron que la idea es que los migrantes reciban atención digna y se recupere el orden en la ciudad, donde se han registrado hechos violentos.
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