Acarigua.- Al menos 500 mil toneladas de caña —equivalentes a 40 millones de kilos de azúcar— se dejarán de moler en el Central Azucarero Santa Elena, ubicado en Las Majaguas, zona norte de Portuguesa, debido a las demoras de trabajos de reparación que se realizan en la factoría.
La situación fue expuesta este lunes 30 de noviembre, durante una toma en la empresa, por los 81 cañicultores del sistema de riego Las Majaguas, a quienes les corresponde arrimar su cosecha a este central, en manos del Estado desde hace una década, cuando fue expropiado durante el gobierno de Hugo Chávez Frías.
La paralización del Central Santa Elena obliga a los cañicultores a transportar la caña a los centrales Portuguesa, en Acarigua; Río Guanare, en la capital portugueseña, y La Pastora, en el estado Lara, encareciendo los costos por el transporte de la caña.
«La fábrica no está reparada. Están medio arreglando las calderas con unos tubos que llegaron de China, pero aquí no se escucha ni un martillo. Las condiciones no dan para arrancar la próxima zafra, ni ahorita en noviembre ni en enero. Simplemente la empresa no está apta», dijo Fidel Morles, en representación de los cañicultores.
56 de estos productores arrimarán su cosecha al central Río Guanare, y otro grupo al Portuguesa. «Todo el conglomerado de productores de Las Majaguas tiene 500 mil toneladas de caña a disposición de arrimar en este central de Las Majaguas, pero cómo las arrimamos. No se justifica que esté sea nuestro central y nosotros tengamos que llevar la caña a otro lado».
Los costos de los fletes han sido negociados con las otras empresas para que se asuman en conjunto con el cañicultor; sin embargo, los productores temen que puedan quedarse sin cupos en los otros centrales, lo que significaría perder la cosecha. «Este central se hizo para los productores de Las Majaguas, por eso está en el centro de la zona».
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Desvalijamiento
Los cañicultores también denunciaron que la gerencia de la empresa ha sacado de la compañía una cantidad de transportes en condiciones de chatarra, acción que los productores consideran como un desvalijamiento.
«Alrededor de 20 vehículos chatarra, propiedad de la factoría, hemos visto que han sacado de aquí y nadie se ha hecho responsable de dar cuenta de a dónde van. En un principio pensamos que se venderían y usarían el dinero para cancelar la deuda que mantienen con nosotros, pero eso no ha sido así», expresó Ramón Corce Calzada, productor de la zona.
Deuda
Asimismo, recordaron que desde febrero, la empresa mantiene con los 81 cañicultores una deuda de aproximadamente 175 mil dólares, correspondiente a la diferencia del precio del azúcar de la zafra 2020.
«Eso es un aproximado, ya que en ningún momento la empresa se ha sentado con nosotros a conciliar las cuentas. El llamado es al gobernador de Portuguesa, porque el 10 de octubre del año pasado, cuando el Presidente de la República firmó el decreto de transferencia de este central azucarero, se lo pasó al Ejecutivo regional y fue la instancia que escogió a los inversionistas para reactivarlo. También exhortamos al consorcio a que dé respuestas con el pago de esta deuda», indicaron.
El pasado 12 de agosto, durante una reunión con el presidente de la empresa, Generoso Mazzocca, este se comprometió a pagar la diferencia del azúcar a los cañicultores a los 45 días del inicio del refino. «Sacando cuentas, eso correspondía el 27 de septiembre y ya estamos en diciembre y nada. Aquí no hay quien dé respuesta, porque hasta liquidaron a los trabajadores. Han venido representantes del central y no nos han llamado: un silencio total».
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