Valle de la Pascua.- Habitantes de las comunidades rurales Pele El Ojo, Zanjonote, La Manga, La Guada del Calvario, Loma Alta, El Tacal y Los Caños, hasta los límites con el municipio José Félix Ribas a las orillas del río Tamanaco, se encuentran a punto de quedar incomunicados con la población de Valle de la Pascua, debido al mal estado que presentan las vías de comunicación del municipio Infante, estado Guárico.
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En la mayoría de estas comunidades residen numerosas familias campesinas que laboran y viven de la agricultura y la cría, donde sus actividades se ven afectadas, ya que están en peligro por el descuido y olvido gubernamental. Según expresan los afectados, esta situacion los coloca al margen de los servicios públicos que un ser humano debe recibir para vivir con mediana normalidad en la Venezuela del siglo XXI.
En la referida área rural, ubicada al este de Valle de la Pascua, las labores de siembra de maíz, sorgo, frijol y caraotas, por nombrar solo cuatro de los principales rubros con los cuales se logran mantener las familias del lugar, se ven disminuidas cada día más.
Así lo manifestó Yanilce Martínez, dirigente social de las referidas comunidades. “La precaria vialidad con que cuentan estos caseríos rurales es un factor que ha influido considerablemente a la hora de trasladar los pocos insumos y fertilizantes que se logran adquirir con mucha dificultad. No es fácil trasladar estos insumos, ya que en la actualidad son muy pocos las vehículos que se atreven a transitar la abandonada carretera. Ya existen tramos que al caer la lluvia impiden el paso de los carros”, manifestó.
Ricardo Martínez, habitante del caserío Zanjonote, advirtió que la salud y la educación de los que viven en esas comunidades están en riesgo, ya que la única carretera de acceso no es transitable en tiempos de lluvia.
“A los dueños de los transportes que pueden trasladar a los docentes hasta los centros educativos de los caseríos de esta zona rural se les hace difícil cumplir con ello, motivado al mal estado de esa carretera, que tiene las alcantarillas rotas, falta de granza y petróleo, ni hablar de asfalto», dijo.
Agregó que «este deterioro lo vivimos desde hace más de 20 años. Aquí está prohibido enfermarse, la salud y la vida de la mayoría de los que habitamos en estos campos está en alto riesgo, ya que es imposible trasladar hasta Valle de la Pascua a una persona enferma; las condiciones de la carretera no lo permiten”.
Los habitantes de estos sectores rurales pertenecientes al municipio Leonardo Infante dijeron que diariamente deben caminar hasta 20 kilómetros para llegar a Valle de la Pascua. Muchas veces deben hacerlo de ida y vuelta para hacer las compras de alimentos, medicinas y otras diligencias, sin poder contar con el necesario transporte, ya que el autobús que tenían se desapareció y nadie sabe dónde fue a parar.
Por esta situación hacen un llamado urgente a las autoridades de la gobernación, alcaldía y gobierno nacional para que les reparen la única carretera de acceso que permite el tránsito de vehículos hacia y desde los caseríos antes mencionados.
