Madre denuncia desaparición de su familia de refugio en Guasdualito

Barinas.- Yrene Aponte, madre de dos jóvenes que regresaron al país procedentes de Colombia, denunció que desde hace una semana perdió todo contacto con sus dos hijas, quienes tienen un mes confinadas en un refugio de Guasdualito, estado Apure, pese a que los resultados de las pruebas rápidas y definitivas arrojaron negativo por COVID-19.

En un contacto telefónico con El Pitazo la tarde del 9 de junio, la señora Aponte contó que sus dos hijas se regresaron el pasado 10 de mayo en un autobús del plan vuelta a la patria, propiciado por el gobierno venezolano, y desde su llegada por la frontera de Apure están confinadas en un refugio en Guasdualito, pero desde hace una semana perdió todo contacto con ellas.

Refiere Aponte que sus hijas, madres de dos niños cada una, entre dos y 13 años, le contaban vía telefónico que las tenían aisladas en una escuela, en condiciones deplorables porque ni siquiera comida les daban. Temían por la salud de los niños, debido a la falta de alimentación y por lo insalubre del sitio que compartían con más de 30 personas.

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El último contacto que tuvo la señora Yrene Aponte con sus hijas fue la semana pasada. Dijo que ambas les contaron que el grupo familiar, que también incluye a un nieto de 20 años de edad que se regresó con sus tías, la estaba pasando mal en el refugio, en el que ya comenzaban las protestas.

Le informaron que los iban a trasladar a unos hoteles, como efectivamente ocurrió, pero a las hermanas las separaron y cada una quedó en hoteles diferentes con sus hijos. Desde ese momento, hace una semana, la señora Yrene perdió todo contacto con sus hijas y teme por ellas, ya que piensa que pudieron ser víctimas de represalias por reclamar un mejor trato.

Yrene pide a las autoridades nacionales y del estado Apure que le informen qué pasa con su grupo familiar. Que le expliquen por qué, si tanto en las pruebas rápidas como las definitivas para descartar el COVID-19, salieron todos negativos, siguen aislados, como presos en un refugio o en hoteles sin las más mínimas condiciones. ¿Por qué no los devuelven a sus regiones de origen?, se preguntó.