Guanare.- El gobernador Rafael Calles anunció el sábado, 13 de junio, que las 68 estaciones de servicio concesionadas en el estado Portuguesa pasarán nuevamente a manos de sus dueños y que la Guardia Nacional (GN) se limitará a cumplir funciones de seguridad y orden público en dichas instalaciones.
La medida se revierte después de dos años, cuando se produjo una apropiación de dichos establecimientos, los cuales fueron asignados a distintos cuerpos de seguridad para su administración y custodia, y más recientemente a la GN.
Calles se pronunció al respecto por intermedio de sus redes sociales, luego de recibir instrucciones del vicepresidente sectorial del área económica y ministro de Petróleo, Tareck El Aisami, y sostener una reunión con el gremio de gasolineros.
En el encuentro, el mandatario fue acompañado por del general Pérez Ampueda, comandante de la Zona Operativa de Defensa Integra (Zodi) 33, de los representantes de Pdvsa, del sistema biopago y de la juventud del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv).
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Sobre la incorporación de la juventud del Psuv, explicó que esta organización política cumplirá la función de contraloría social. «Van a verificar que todos los procesos de la distribución de la gasolina sean lo más transparente posible», indicó.
En cuanto al sistema biopago, el gobernante oficialista destacó que su uso será obligatorio. «Vamos a ir solventando con Cantv los nudos críticos que presentan algunas estaciones de servicios con el Internet para así garantizar su buen funcionamiento», señaló.
Rafael Calles aspira, con estás medidas, a garantizar que durante los próximos días se normalice a niveles óptimos el suministro de combustible en todo el estado Portuguesa.
Desde que Nicolás Maduro ordenó las nuevas modalidades de suministro de gasolina, a la entidad no ha habido despacho regular de carburantes, con lo cual se ha agudizado la escasez reportada en los 14 municipios desde noviembre de 2017.
Los esquemas de pico y placa, y sorteo de estaciones de servicio para suministro de combustible, ideados por el gobierno de Portuguesa, resultaron un fracaso, según los usuarios, quienes permanecían en colas de hasta ocho kilómetros por lapsos de 48 y 72 horas, pese a la cuarentena social obligatoria decretada desde el 13 de marzo por el gobernante Nicolás Maduro.
El mandatario Rafael Calles reconoció la semana pasada través de sus redes sociales que el desabastecimiento de gasolina obedece a problemas relacionados con la flota de transporte. «Para un suministro óptimo se requieren, al menos, 70 gandolas. Estamos tras la búsqueda de nuevas unidades para completar la flota de 15 gandolas con que cuenta Pdvsa. Aspiramos la incorporación de 14 cisternas de parte de los privados», dijo.
