Acarigua.- Un grupo de habitantes del sector Algorrobo de Acarigua, en Portuguesa, protestó este jueves 8 de octubre, en la avenida principal de la comunidad, no solo por los constantes cortes de electricidad que se registran en la zona, sino también por la promesa incumplida del Gobierno regional de reponer un transformador quemado hace más de tres años.
La avería del aparato ha causado que no haya corriente 220 en las casi 80 viviendas que hay en el sector, lo que les impide a las familias usar equipos que requieran mayor capacidad eléctrica, como refrigeradores y aires acondicionados.
La protesta de este jueves, la lideraron las amas de casa de la comunidad. Al menos 20 de ellas salieron a la calle, denunciando que sus casas están quedando sin electrodomésticos porque se han quemado por las fallas recurrentes de la corriente 110. «Son más los días que no tenemos luz que cuando sí hay. Y nuestro mayor problema es que no tenemos ese transformador que nos prometieron hace tres años cuando se quemó. Nos hemos cansado de meter cartas en todos lados, Corpoelec, Alcaldía de Páez y gobernación, y nada que hay una respuesta. Sólo promesas», dijo Evangelina Vizcaya, ama de casa del sector.
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Las vecinas precisaron que han perdido lavadoras, televisores, neveras entre otros electrodomésticos por las fallas. «¿Quién nos responde por eso?», dijo otra de las habitantes de la zona, alegando que los equipo que pierden no los pueden reponer por el alto costo que tienen. «Todos sabemos lo difícil que está la situación, y realmente de broma tenemos para comer». Las deficiencias en el servicio eléctrico les impide usar hasta los ventiladores, por lo que niños y ancianos de la zona se sofocan y viven con picadas de zacundos que abundan en el lugar, por una quebrada que pasa frente a la calle principal.
«Tuvimos unos vecinos ya mayores con problemas respiratorios que necesitaban nebulización y aunque se tenía el aparato no se pudo conectar por la falla eléctrica. Aquí hay muchos niños con el mismo problema y no podemos hacerle ese tratamiento por temor a que se nos queme el nebulizador, o porque simplemente nos quedamos sin luz», dijo Viscaya.
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Por su parte, Eliana Vizcaya, también habitante de la barriada, precisó que actualmente, ante la escasez de gas doméstico que se registra en todo el estado, muchas familias de la comunidad usan cocinas eléctricas, aún con el riesgo que se genere un cortocircuito, por la corriente que estos aparatos demandan. La comunidad exhortó a las autoridades a atender su necesidad lo más pronto posible, de lo contrario tomarán acciones más radicales.
