San Juan de los Morros.- Las lluvias de este martes volvieron a inundar el centro deportivo y recreativo «Los Morrritos» en la capital del estado Guárico, sitio donde permanecen desde hace más de un año ocho familias damnificadas que hoy piden a las autoridades ser reubicadas en viviendas dignas.
«Aquí nos tienen esperando, ya no queremos más engaños por favor, nosotras queremos es que nos reubiquen al -complejo urbanístico- Hugo Chávez o en otras viviendas, como dijeron cuando nos trajeron para acá», comentó Rosany Utriz, una de las afectadas.
Utriz es madre de cuatro hijos, con quienes duerme sobre unos colchones desgastados en el pasillo de aquella estructura que hace una década, aproximadamente, era destinada a la recreación y el desarrollo de deportes de combate y pelotas en el municipio Roscio Nieves. Hoy es una instalación deteriorada y abandonada por las autoridades locales.
En el refugio, junto a sus ocho madres, hay 16 niños afectados, dos de ellos con condiciones especiales. Están allí desde julio de 2018, luego de quedar damnificados, producto de un fuerte aguacero y vientos huracanados que arrastraron sus casas de zinc en la comunidad Lomas del Mangar del sector El Jobo.
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Otra de las afectadas es Claudia Torrealba, madre de tres niños, uno de ellos es Jesús Graterol, de 12 años, quien padece una condición de parálisis espástica que le impide la movilidad de sus piernas. Jesús requiere de una silla de ruedas en buen estado, debido a que la que tiene actualmente ya muestra deterioro.
A pesar de no poder ponerse de pie, Jesús es un chico sonriente y tan amigable como inteligente. Cuando habla suele ser atinado: «Yo quiero vivir en una casa con mi mamá», contó al equipo de El Pitazo.
Claudia sueña con el momento en el que pueda estar con sus hijos en su propia casa: «esto cansa, no es fácil vivir en estas condiciones, cuando llueve es horrible. Se mojan los colchones y lo poco que tenemos. De verdad solo pedimos que nos reubiquen en las viviendas que nos prometieron», enfatizó Torrealba.
Mientras la alcaldesa del municipio Roscio, Nives Mayerling Colmenares, y gobernador del estado, Jose Vásquez, se ponen de acuerdo para buscar una solución habitacional, las ocho madres y sus niños, con poca ropa, siguen soportando las penurias bajo una instalación que se inunda con las lluvias y carece de los servicios básicos.
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