Foto: Cortesía
Mérida.– “Yo, sin agua, sin gas y ya la luz se había ido en la mañana”, comentó Ana Martinez a El Pitazo este lunes 7 de octubre. Martínez vive en El Campito en un edificio que desde hace dos semanas no cuenta con gas doméstico. Más de doce horas estuvieron sin electricidad durante el fin de semana.
Los vecinos denunciaron que los cortes de electricidad no tienen un horario fijo que les permita poder planificarse para las actividades diarias.
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“Cuando hay gas es una preocupación menos, porque si se va la luz, pues tenemos para cocinar, pero ahora sin gas y sin luz se nos complica todo”, dijo Martínez. Además, relató que cuando falla la corriente, automáticamente, falla el servicio de agua.
Los vecinos también manifestaron su preocupación por los daños que pudieran ocasionar las fallas de energía a los electrodomésticos, algo que en ocasiones anteriores ya ha sucedido: han sufrido daños las pantallas de las computadoras, los televisores y, por supuesto, hay infinidad de bombillos quemados.
El Pitazo realizó un recorrido por algunos establecimientos comerciales del centro de la ciudad, donde constató que las fallas en el servicio además afectan el trabajo de los comerciantes. Algunos comentaron que al no funcionar la electricidad tienen pérdidas, ya que los puntos de venta no funcionan.
«No podemos aceptar transferencias, porque no tenemos cómo verificar, y menos si están trabajando con transferencias de diferentes bancos», narró Gustavo Osuna, dueño de una zapatería ubicada en el centro de la ciudad.
Son varias las medidas que el Gobierno ha anunciado para brindar el servicio eléctrico; sin embargo, hasta ahora no ha sido posible ninguno de los planes presentados. Los merideños siguen viviendo a oscuras y sin un horario fijo de racionamiento eléctrico.
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