Los pacientes de la Unidad de Diálisis Andina, en Valera, corren un riesgo mortal por no tener catéteres para realizar el tratamiento | Fotos: María Gabriela Danieri
Valera.- La Unidad de Diálisis Andina tiene tres meses sin recibir catéteres para realizar el tratamiento a los pacientes con deficiencias renales. La institución, ubicada en el municipio Valera del estado Trujillo, depende del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (Ivss).
Quienes ingresan a ella por primera vez y no poseen una fístula o deben reemplazar el catéter por daños u obstrucciones, tienen que acudir con un informe médico a la Dirección Nacional de Nefrología y Trasplante del Ivss, ubicada en El Silencio, Caracas.
Este procedimiento deben hacerlo desde mediados de noviembre, cuando dejaron de recibir esos implementos directamente con el despacho de insumos asignados. De esta manera lo corroboró la doctora Ángela Cardozo, administradora de la unidad.
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Era frecuente que les enviaran de cinco a 10 catéteres mensuales, según los informes enviados por ellos y el flujo de pacientes nuevos. No obstante, sin una explicación previa, dejaron de hacerlo y ordenaron a quien no pudiera costearlo económicamente solicitarlo personalmente en la capital.
Esta unidad de diálisis, que tiene otras dos sucursales en Trujillo y Boconó, atiende a 66 pacientes fijos, pero ha dejado de admitir a nueve personas en enero debido a esta carencia.
Olga Lizarazo, familiar de un paciente renal, relató cómo un señor falleció por no tener el reemplazo de un catéter.
“Hace un mes se murió el señor Paderes por un catéter que no tuvo a mano. Duró ocho días el señor con un catéter para que se lo esterilizaran pero ni en el seguro ni en el hospital se lo hicieron. Ya a los 14 días, cuando consiguieron un cirujano para hacerle la operación, le cobraban 700 dólares para colocárselo. Al día siguiente falleció”, relató Lizarazo.
La declarante comentó que esta semana viajará a Caracas para solicitar una reunión con la directora y plantear estas necesidades. “Aquí hay gente que necesita una calidad de atención para sobrevivir. Hoy viajo para Caracas; vamos a ver qué me dice la doctora Emiliana Romero. No le he notificado de los catéteres, pero vamos a montarnos en eso y en la dotación de medicinas» expresó Lizarazo.
Además de la falta de este insumo, que no se consigue en cualquier farmacia y ronda los 200 dólares, el Ivss no envía las suficientes vitaminas. “No le viene el hierro, las vitaminas que requieren. Son pacientes a los que se les baja la hemoglobina a cinco, a cuatro a tres. Es una crisis en todo el país, sí, pero queremos que se aboquen un poquito más”, agregó la declarante.
En el municipio Valera, el agua potable es escasa debido a los problemas de bombeo en el acueducto metropolitano. Esto también afecta a la unidad de diálisis, cuyos pacientes deben ir al llenadero de Santo Domingo a solicitar dos camiones cisterna diarios.
“Nos toca ir hasta a pie para el llenadero y estar una hora allá para que nos traigan el agua y completar el tratamiento”, contó Ender Araujo, quien relata que en ocasiones se vacía el tanque de la institución y corre el riesgo de no cumplir con su sesión de diálisis de cuatro horas.
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