San Cristóbal.- Funcionarios de las Fuerzas de Acciones Especiales –Faes- de la Policía Nacional Bolivariana –PNB- han estado revisando e investigando desde el pasado lunes las oficinas administrativas, de farmacia y depósito del Hospital del Seguro Social “Dr. Patrocinio Peñuela Ruiz” de la ciudad de San Cristóbal, ante presuntas irregularidades cometidas por su director Alberto José González.
A través de una minuta levantada por la Región Estratégica de Defensa Integral Andes –Redi-; la Zona Operativa de Defensa Integral –Zodi- Táchira y el Faes, al médico se le acusa de los presuntos delitos de sustracción ilegal de medicamentos, sustracción ilegal de material médico quirúrgico, donaciones de insumos médicos y venta de bienes nacionales sin la debida autorización, por lo que en compañía de la fiscalía 23 con competencia en delitos de la función pública verifican áreas y departamentos del hospital.
De acuerdo al acta, comprobaron ausencia de controles de medicamentos masivos, de alto costo y psicotrópicos; la asignación de vehículos oficiales a particulares, sustracción indebida de gasoil de la planta eléctrica, así como una doble nómina de personal adscrito a funciones públicas de carga exclusiva.
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También está siendo investigada su esposa Mena Aurora Fiore Patiño, presidenta de la Fundación Niño Simón, pues en esa sede encontraron inyectadoras, uniformes, ampollas de vitaminas y suspensión oral antifebril sustraídas del hospital del Ivss.
De parte de las autoridades regionales ha existido hermetismo respecto al caso, y diputados regionales como Nellyver Lugo (Psuv) y Domingo Sandoval (Copei) manifestaron a El Pitazo no tener información sobre el caso, pues es manejado por entes de seguridad.
Inspecciones
El Pitazo ingresó este miércoles, 15 de enero, a las instalaciones del Hospital del Seguro Social y conversó con algunos trabajadores, quienes solicitaron no ser identificados por temor a represalias, pues efectivos del Faes se encontraban revisando el depósito de farmacia y otras áreas, acompañados de funcionarios de Contraloría Sanitaria. De hecho, minutos después se llevaron a rendir declaraciones a la jefa de enfermería.
Una empleada del área de emergencia precisó que el trato con él era tenso, por lo que evitaban tener algún tipo de encuentro. “Hacia nosotros casi no se dirigía, porque nosotros trabajábamos con jefes inmediatos, el mayor problema era con sus subalternos, a quienes trataba con desprecio”, expresó.
Indicó que trabajan a media máquina porque hay poco personal, falla de medicamentos y la paralización de algunas áreas como laboratorios –porque no llegan reactivos desde hace 2 años-, anatomía patológica, ecografía y hasta hace poco medicina interna. En el área de emergencia destacó que en algunos momentos no hay especialista.
Una enfermera, que también pidió no ser identificada, comentó que el director quería quitar la oficina de enfermería y otras áreas, para dedicarlas a reuniones políticas. “Nos la quería quitar porque esa iba a ser una oficina para reuniones políticas, eso lo decía a vox populi, igualito en varios sitios”.
