Mérida.- Más de 37.000 personas que residen en Sucre (Lagunillas) y San Juan, las dos parroquias más habitadas del municipio Sucre del estado Mérida, según el censo de 2011 del Instituto Nacional de Estadística (INE), están sin servicio de agua desde el pasado 1 de noviembre. La causa es la rotura de la tubería matriz que surte a estas poblaciones.
La avería ocurrió luego de que un movimiento de masa, que sucedió mientras llovía fuertemente, provocó la fractura y posterior desplazamiento de 230 metros lineales de la tubería de 16 pulgadas que lleva agua a las referidas parroquias. Así lo precisa el decreto municipal emitido por el alcalde, Julio Guillén, el martes 2 de noviembre, en el que declara ambas parroquias en condiciones de atención especial para la prestación del servicio de agua potable.
Tito Araque, habitante de Lagunillas, escribió ayer, martes 9 de noviembre, a través de un grupo de WhatsApp, que las autoridades no informan cuándo se restablecerá el servicio, indispensable aún más en tiempos de pandemia por COVID-19. El abastecimiento con camiones cisterna es esporádico e insuficiente para atender a toda la población afectada.
«La situación es grave. Aquí hay personas enfermas, pacientes con COVID-19, abuelos, personas de la tercera edad que necesitan tener el agua», dijo Araque a El Pitazo vía telefónica este miércoles, 10 de noviembre.
Reparaciones en marcha
Brian Márquez, gerente operativo de la hidrológica Aguas de Mérida en el municipio Sucre, informó el 4 de noviembre que el día anterior se habían iniciado los trabajos para instalar una tubería de paso (bypass) en el tramo afectado. El servicio aún se mantiene suspendido.
Por su parte, el alcalde de Sucre, Julio Guillén, dijo el pasado domingo que habían recibido materiales para la sustitución total de la tubería afectada, cuyo estado de deterioro ha afectado en reiteradas ocasiones el suministro de agua potable a las mencionadas comunidades.