Valera.- Uno de los efectos colaterales de la escasez de gas doméstico, en el estado Trujillo, ha sido el aumento en los casos de mordeduras de serpientes en la región. Los ciudadanos, cada vez con mayor frecuencia, acuden a las zonas boscosas a recolectar leña para cocinar y ocurren los ataques.
De acuerdo a la dirección municipal de Protección Civil, esto ha ocurrido en la población de San Rafael de Carvajal, desde mediados de abril. El organismo registra de cuatro a cinco casos semanales y piden a la ciudadanía abstenerse de esta práctica.
“Tenemos alrededor de cuatro a cinco mordeduras de serpiente por semana, entendemos la situación, pero necesitamos un poquito más de conciencia de todas las personas, pedimos de su parte. Esta situación no está fácil, aparte de la pandemia , pero tratemos de no invadir el espacio de las serpientes, tratemos de salir de esos montes”, declaró Carlos Colmenares, director de la instancia municipal, en la mañana de este jueves, 25 de junio.
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Escasez de suero
El exhorto del cuerpo de seguridad está inmerso en su preocupación por la escasez de sueros antiofídicos. Un fenómeno mundial, pero que en Venezuela se agrava por otras circunstancias ligadas a la escasez de combustible y transporte.
“Es algo muy complejo. Está muy escaso, los traslados, todo eso. Tenemos problemas para conseguirlos. En el mercado normal, una dosis de suero antiofídico sale entre 100 y 150 dólares.
Todo el equipo que está acá, y las instituciones de la región, no pedimos ni un bolívar. Se nos dificulta traerlos de Barquisimeto, de Maracaibo o Caracas por el problema de gasolina”, dijo Colmenares.
El funcionario recordó que recientemente una joven perdió la pierna, porque los sueros llegaron tarde. En esa oportunidad se entregó una dotación, con la cual, esta semana, otra joven pudo recibir sus cuatro dosis; sin embargo, el repunte de casos hace que la existencia del medicamento no sea suficiente.
“En la dirección de Protección Civil estamos a la orden para todas las atenciones en el Hospital Central (de Valera), con el ingeniero Santos Bazo, con la gente del Ianet (Instituto de Alimentación y Nutrición). Todos esos organismos nos están apoyando y necesitamos que ustedes también pongan de su parte”, finalizó el funcionario.
Incidencia ambiental
El teniente Luis Contreras, del Instituto Nacional de Espacios Acuáticos (Inea) Maracaibo, reconocido por trasladar los antídotos a los pacientes manifestó que los sueros son producidos en el país por la Universidad Central de Venezuela (UCV), pero que no es suficiente debido a los costos elevados de su elaboración.
Una situación que se complica en esta época, cuando la curva de mordeduras de serpiente va en aumento, por los factores ambientales: cambio climático y comportamiento natural de las serpientes en épocas de lluvias.
En Trujillo, de acuerdo a Protección Civil, se han encontrado serpientes, de ambientes cálidos, en zonas altas como La Puerta. Actualmente, los ataques más frecuentes son de mapanares rabo amarillo, corales y cascabeles. Recordaron que los animales no tienen la culpa de los ataques, pues se deslindan de la invasión de su hábitat.
