/ Foto: Cortesía familiares
Valera.- Un solo disparo de escopeta atravesó la mano de Víctor Manuel Álvarez Gaviria, de 23 años, y le causó una herida mortal en el cráneo. El asesino, luego de cometer el crimen, abandonó el cuerpo de su víctima en la vía pública del sector La Mata, municipio Escuque, estado Trujillo, la madrugada del 1 de enero.
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Jazmín Medina, esposa del hoy fallecido, relató en la morgue del hospital Dr. Pedro Emilio Carrillo, del municipio Valera, que Víctor Álvarez Gaviria había salido de su vivienda, en el sector La Garita de Escuque, a las 3:00 am, con un vecino motorizado a comprar más alcohol. Se había agotado y querían seguir la celebración del Año Nuevo.
Ella le pidió que no fuera porque el vecino, conocido como “el Gerald», le daba mala espina. “Yo te acompaño, amor. No te vayas con él”, le rogó, pero él se montó en la moto y el conductor arrancó a toda velocidad.
Jazmín Medina explicó que horas antes el dueño de la moto había peleado con Víctor Álvarez por un trago de licor y le dijo: “Te voy a matar, tenemos culebra», pero el muchacho, de apenas 23 años, le dijo a su esposa que no era una amenaza real, que eran palabras de borracho.
No hay rastros del sospechoso
Sin embargo, Víctor Álvarez no regresó. Unos familiares lo vieron a las 4:00 am en el pueblo. Tenía dos botellas y se bajó a saludarlos. Después uno de los parientes le dijo a Jazmín Medina: «Cuando se montó en la moto casi se caía porque el chamo arrancó duro».
La mujer lo buscó en la estación policial con la esperanza de encontrarlo detenido, pero un oficial le dio la mala noticia: “A él lo encontraron los bomberos. Tenía un tiro de escopeta y lo llevaron a la morgue de Valera».
Del sospechoso no se sabe nada, según contó la viuda mientras se encontraba en las afueras del Servicio Nacional de Medicina Forense (Senamecf), en la mañana de este jueves, 2 de enero.
“El Gerald» no ha aparecido por el sector y el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) lo busca para interrogarlo. De acuerdo con la declarante, el hombre posee armas, porque le gusta cazar animales, pero no tiene mayor información sobre él.
Obrero de construcción
Víctor Manuel Álvarez Gaviria, oriundo de Escuque, tenía un mes en el sector La Garita, donde un amigo le ofreció cuidar una casa. Se mudó con su esposa y sus dos hijos, de cuatro y dos años. Según ella, el joven se dedicaba a la construcción con su papá y también a realizar por su cuenta trabajos de limpieza de monte.
Este caso, investigado por las autoridades, es el primer homicidio del 2020 en Trujillo.
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