Al menos tres personas han muerto tras la explosión que ha provocado el derrumbe de parte de un edificio de seis plantas en la calle Toledo, en el centro de Madrid, en torno a las tres de la tarde de este miércoles | Foto: EFE
Madrid.- Una venezolana relató a El Pitazo cómo se encuentra parte del centro de Madrid tras una explosión de gas ocurrida la tarde de este miércoles, 20 de enero. El suceso que conmocionó a toda España dejó el saldo de tres muertos y, al menos, 11 heridos, según los reportes de las autoridades del país.
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«Hay mucha gente herida. A algunos abuelos los tenían resguardados en lugares cercanos. Todavía hay bomberos trabajando en el lugar. Todo está sumamente destruido y sucio, pero la Guardia Civil y los vecinos están en el lugar haciendo la limpieza de toda la zona.», contó Valeria Mora, quien se encontraba en su lugar de trabajo cuando ocurrió la explosión.
Aunque Mora no alcanzó a escuchar la doble explosión, se alarmó cuando vio a otras personas entrar en pánico, por lo que salió de la oficina para ver lo que ocurría a una corta distancia del lugar donde se encontraba.
Mora también detalló que tras la explosión los buses y los taxis dejaron de prestar servicio, pero el metro se mantiene activo.
La explosión, descrita como «brutal» por testigos presenciales y que causó el derrumbe de una parte un edificio, afectó a al menos cuatro plantas de la estructura y tuvieron que ser evacuados varios inmuebles colindantes.
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Entre ellos un colegio y un geriátrico, cuyos 56 residentes fueron trasladados a otros centros, varios de ellos con medidas de seguridad al estar contagiados por COVID-19.
También fueron trasladados inquilinos del edificio colindante que resultó afectado, que pasarán la noche en recursos municipales a la espera de que se les comunique si pueden volver o no a sus casas.
Según Emergencias Madrid, todo apunta al gas como causa de la deflagración, un dato confirmado en el lugar por el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, quien explicó que el origen podría ser una explosión en las viviendas de la parte superior del edificio, unos detalles que intentan aclarar los bomberos.
El alcalde informó que el edificio estaba ardiendo pero no era prudente intervenir porque, si se apaga el fuego, podría producirse un embolsamiento de gas que «podría afectar a la estabilidad y estructura».
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