Caracas.- El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ha utilizado su tiempo para alimentar aves y conducir su motocicleta en el Palacio de Alvorada, la residencia oficial del mandatario. Esto ocurre mientras se recupera del coronavirus.
El Ejecutivo brasileño resultó dar positivo a la prueba del coronavirus el pasado 7 de julio y lo que se sabe es que se están tratando con cloroquina. El día que informó el jefe de Estado, de 65 años y uno de los líderes más escépticos sobre la gravedad de la enfermedad, compareció con una mascarilla blanca simple y sin respetar la distancia de seguridad con los periodistas.
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Casi al final de su intervención, Bolsonaro dio unos pasos para atrás para alejarse unos pocos metros de los periodistas y se quitó la mascarilla a fin de pronunciar unas últimas palabras. Por esta razón , la Asociación Brasileña de Prensa presentará una demanda a la Corte Suprema contra el presidente por «poner en riesgo» la vida de los periodistas.
