Miembros de la policía patrullan la estación ferroviaria de Once este viernes, en Buenos Aires, en al primer día de cuarentena. | Foto: Efe/Juan Ignacio Roncoroni.
Este viernes, primer día de cuarentena total en Argentina, dejó imágenes inusuales por las calles del país, casi desértico. Las fuerzas de seguridad detuvieron a personas que se saltaron el decreto que entró en vigor a la medianoche. También se confirmaron 30 nuevos casos de coronavirus.
En total, según el balance diario del Ministerio de Salud, hay 158 casos de COVID-19 en Argentina, la mayoría de ellos en la ciudad de Buenos Aires y su provincia homónima, y hasta el momento se produjeron tres muertes.
Aún se estudia la procedencia de 10 de los casos confirmados, mientras que el resto se sabe que fueron personas con antecedente de viaje a zona de riesgo o individuos con contacto con esos casos.
La mañana siguiente de que el presidente decretase el aislamiento social preventivo y obligatorio, el expresidente Mauricio Macri (2015-2019) habló con su sucesor sobre la crisis del coronavirus, informaron fuentes gubernamentales a Efe.
Después de ello, Macri escribió varios mensajes en su cuenta en Twitter en los que expresó su apoyo a las decisiones del gobierno.
«Quiero invitar a todos a ser responsables y mantener la calma, así como a acompañar las medidas que tomó el gobierno. Sé que las noticias que llegan del mundo por momentos pueden causar inquietud, pero no debemos caer en la zozobra», expresó Macri.
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En los últimos días, Fernández ya había contado con el apoyo de todos los gobernadores, entre los que hay varios opositores, así como del jefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, también opositor y del partido de Macri, Horacio Rodríguez Larreta.
«Ante estas situaciones es fundamental reaccionar de manera racional, proporcional y equilibrada y evitar que el miedo controle nuestras decisiones (…) Si lo hacemos bien, y logramos desacelerar el recimiento de la epidemia, podremos retomar nuestra vida normal lo antes posible», recalcó Macri.
«Estemos unidos. Cuidémonos entre todos», sentenció ante la amenaza actual.
El tráfico en la capital argentina se redujo de manera drástica en el primer día de medidas y las calles comenzaron a presentarse más vacías, aunque multitud de establecimientos como supermercados y farmacias presentaron colas en todos los rincones del país, con la gente intentando abastecerse.
La icónica Plaza de Mayo, con la Casa Rosada, sede del gobierno, lucía casi sin gente ni vehículos: la etiqueta #YoMeQuedoEnCasa se convirtió en la mayor tendencia en Twitter en el país.
Sin embargo, con la policía en la calle, también se produjeron las primeras detenciones por transitar de manera injustificada por la calle. En la provincia de Córdoba (centro), una de las mayores del país, la Policía informó en Twitter que hasta el momento detuvo a 55 personas.
En la capital, las fuerzas del orden demoraron a 26 personas que violaron la cuarentena obligatoria, y además hubo varios controles de vehículos en diferentes accesos y salidas de la ciudad.
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Según un informe de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, durante el primer día de aislamiento hubo un 80% de reducción de tráfico respecto a un día normal en la capital, mientras que las autopistas registraron un flujo de vehículos un 70% menor al viernes de la semana pasada.
La Secretaría de Transporte y Obras Pública de Buenos Aires registró una caída del 95 % en los pasajeros que transportó el Subte (metro), lo que significó un promedio de cinco personas por vagón.
El uso del tren bajó 77% y los colectivos transportaron 56% menos de pasajeros.
El índice S&P Merval de las acciones de las empresas líderes que se cotizan en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires saltó este viernes un 5,45%, hasta los 23.890,35 puntos, y el índice de riesgo país de Argentina cayó en el primer día de aplicación de la cuarentena total declarada por el Gobierno de Alberto Fernández.
Tras haberse hundido 14,47% este miércoles y rebotar un 2,58% el jueves, el S&P Merval recuperó hoy otra parte más del terreno perdido, a tono con el mejor clima global que, de todas formas, sigue muy afectado por las repercusiones de la pandemia de coronavirus
El presidente argentino, Alberto Fernández, se reunió hoy con los jefes de las Fuerzas Armadas, a quienes dio instrucciones para realizar tareas de prevención y control en el marco de la emergencia.
El despliegue de las fuerzas será con la totalidad de los 90.000 efectivos militares en todo el país.
En rueda de prensa, el ministro de Defensa, Agustín Rossi, dijo que los hospitales miliates están a disposición del sistema de salud e indicó que las fuerzas militares fabrican alcohol en gel y productos textiles para el sector de la salud.
«Desde el día de hoy hay un patrullaje aéreo de dos helicópteros de la Fuerza Aérea y del Ejército argentino que están patrullando sobre la ciudad de Buenos Aires para avistar alguna situación en la que no se cumplan las normativas de comportamiento social que emanan del decreto firmado por el presidente», dijo Rossi.
Además, anunció que este sábado saldrán dos aviones Hércules de la Fuerza Aérea hacia Lima con peruanos y que traerán de regreso el domingo a argentinos varados en Perú.
La Administración Nacional de Aviación Civil de Argentina informó este viernes de que autorizó cien vuelos excepcionales de distintas aerolíneas internacionales para facilitar la repatriación de los cerca de 20.000 argentinos que quedaron varados en el exterior.
En un principio, solo la estatal Aerolíneas Argentina estaba autorizada para realizar estos vuelos.
Las autoridades autorizaron ahora vuelos de diversas compañías a Brasil, Perú, Francia, Alemania, Bélgica, Chile y Paraguay.
En tanto, Aerolíneas Argentinas anuncio hoy la ampliación de sus vuelos especiales, que ahora ascienden a 32.
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