Nueva Esparta.- Hasta cuatro meses sin recibir agua pueden durar las comunidades de Villa San Antonio y Pedro Luis Briceño, del municipio García del estado Nueva Esparta. Así lo denunció este jueves, 3 de septiembre, el infociudadano Gabriel Alarcón, quien además asegura que otros sectores del municipio la reciben con mayor frecuencia, pero no con mayor suerte.
Alarcón señaló que este problema ocurre desde hace al menos un año y medio y se debe a múltiples botes de agua en distintos tubos matrices que surten al municipio. Los vecinos han registrado al menos 12 botes de agua en los últimos 18 meses. Algunos han sido atendidos, pero otros se mantienen a pesar de las denuncias y protestas.
“En el municipio García actualmente solo hay dos formas de surtirse de agua sin comprarla. La primera, una toma que sale de un río en el sector 80 de Villa San Antonio, donde las personas deben caminar hasta tres horas para llegar hasta ahí, dependiendo del sector del que vengan. La otra, dos tuberías rotas que hay en la avenida Juan Bautista Arismendi, que no se han reparado desde julio de 2019”, apunta el infociudadano.
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Según Alarcón, los vecinos deben hacer largas colas para llenar botellones y bidones en ambos lugares, y algunos deben realizar este proceso diariamente por no contar con los recursos suficientes para abastecerse por más tiempo.
El infociudadano comentó que en numerosas ocasiones los vecinos del municipio García han salido a protestar en las calles por la escasez de agua. Igualmente, afirmó que han levantado denuncias ante Hidrocaribe, la Alcaldía, la Gobernación y el Ministerio de Ecosocialismo y Aguas, pero nunca se ha llegado a una solución favorable y definitiva para la comunidad de García.
Agua de mala calidad
Aunque las urbanizaciones Villa Rosa y Villa Hermosa reciben agua suministrada por Hidrocaribe con mayor frecuencia, esta sigue siendo insuficiente. En estos sectores, los vecinos pueden pasar uno o dos meses sin recibir agua en sus hogares, pero lo peor sucede cuando llega.
Según el infociudadano Gabriel Alarcón, el agua que llega a los hogares de estas comunidades no es apta para consumo humano, ni siquiera hirviéndola o tratándola en casa. El líquido sale de los grifos con un color marrón muy espeso, lleno de tierra y otros sedimentos, y el olor que emana del agua evidencia que no puede consumirse.
“¿Cómo se concina con el agua en ese estado? ¿Cómo alguien puede bañarse con ella o beberla? Es un riesgo altísimo para la salud de los ciudadanos. Hidrocaribe debe hacer algo para solucionarlo porque el servicio que prestan es pésimo, y no ha habido denuncia que valga”, finalizó Alarcón.
