Saúl Castillo y Samuel Aguilar son dos niños venezolanos que migraron junto a sus familias a la ciudad de Camilo Ponce Enriquez, en Ecuador. Ambos tienen 10 años y cursan sexto grado en el colegio Miguel Heredia Crespo de esta ciudad.
Como millones de niños, Saúl y Samuel tuvieron que adaptarse a las clases online debido a la pandemia del COVID-19. No fue una tarea sencilla, aseguran, pero los dos lograron hacerlo y hoy continúan formándose a distancia.
El lunes 3 de agosto, su profesora les pidió como parte de una tarea hacer un programa de radio informativo. Cuál sería la sorpresa de Miguel Tona, abuelo de Saúl e infociudadano, cuando su nieto le dijo: “abuelo, mi programa se va a llamar El Pitazo en la Radio y quiero que me ayudes a grabarlo”.
“Desde que migré en 2019 nunca he dejado de confiar en El Pitazo para informarme sobre todo lo que sucede en Venezuela y el mundo. Esto lo sabe mi nieto, a quien además le he enseñado lo importante de la labor periodística porque es algo que me apasiona desde hace años, pero no esperaba que me pidiera algo así”, comenta Tona.
Miguel se formó como infociudadano en 2017 y asegura que se siente orgulloso de pertenecer a la familia de El Pitazo incluso a la distancia debido a la responsabilidad y el riesgo que representa informar en un país como Venezuela.
Alegre por la petición de su nieto, Miguel decidió ayudar a Saúl y su amigo Samuel con su proyecto, y entre los tres armaron un micrófono de cartón, pintaron una lámina con el logo de El Pitazo en la Radio, y en la sala de su casa teatralizaron una entrevista sobre los niños inmigrantes de Venezuela.
En el video que hicieron llegar a El Pitazo, Saúl entrevista a Samuel como si fuese uno de nuestros locutores, y por un par de minutos ambos se sumergieron en la experiencia de la locución y el periodismo venezolano.
Al preguntarle a Saúl por qué decidió llamar así a su programa radial y cómo fue el proceso para cumplir con su tarea, señaló: «elegí a El Pitazo porque mi abuelo es infociudadano y siempre habla de ustedes, además de ser la plataforma internacional que más información nos ofrece. La grabación del programa fue muy divertida y lo que más me gustó fue sentirme como un locutor mientras entrevistaba a mi amigo».
Saúl asegura que tuvieron que grabar varias veces el programa y que al principio la cámara lo ponía nervioso, pero eso no los detuvo y ambos siguieron grabando hasta que quedaron satisfechos con su tarea. Por su parte, Samuel también expresó su alegría y agregó que lo volvería a hacer otra vez si se lo pidieran como tarea en el colegio, o solo para jugar con su amigo.
Mientras, Miguel también quedó satisfecho con lo logrado, e incluso agradeció al equipo de El Pitazo por “siempre mantenernos informados, por ser una importante ventana de denuncia para todos los venezolanos y por haber denunciado mi detención durante las elecciones municipales de 2018, cuando la Guardia Nacional me detuvo por grabar irregularidades en los comicios de Guanare”.
Con esta historia Miguel, Saúl y Samuel nos inspiran a seguir trabajando día a día con el mismo compromiso que desde el inicio de este proyecto asumimos, y a seguir mejorando tanto como medio informativo, como formador de infociudadanos y espacio de denuncia pública.
A Miguel Tona, Saúl Castillo y Samuel Aguilar ¡gracias! Por ustedes y todos nuestros lectores seguiremos sonando donde otros callan, con la veracidad y objetividad periodística que siempre nos ha caracterizado.
