Foto: cortesía
Puerto Ayacucho.- Un nuevo apagón se registró en Puerto Ayacucho desde las 2:00 pm hasta las 6:00 am de este jueves, 24 de septiembre, generando protestas en diferentes sectores. Las cacerolas comenzaron a escucharse a las 7:30 pm, incluyendo los gritos de los vecinos que con consignas pedían el retorno de la luz.
Luis Eduardo Nieves, residente de San Enrique, dijo a El Pitazo que los vecinos salieron hasta la calle y sonaron sus cacerolas por tres horas como señal de molestia por esta nueva falla en el servicio. Nieves reveló además que quemaron cauchos pidiendo una respuesta de las instituciones de gobierno.
“Nuevamente nos quedamos sin luz y los bajones siguen con mucha intensidad, mientras que Corpoelec solo envía comunicados diciendo que todo se debe a una falla en San Gerónimo”, enfatizó Nieves, quien precisó que este es el tercer apagón que ocurre durante la semana que se ha extendido por varias horas.
“Toda la noche sin luz y por tercera vez en la semana. Los que dirigen Corpoelec no han podido solucionar este problema y les cuesta reconocer que son ineficientes porque el cargo les quedó grade”, recalcó Nieves.
Asimismo, Herminia Sandoval, del sector Warequena, reiteró que sus vecinos tomaron la calle principal para sonar las cacerolas y bloquearon la vía con la quema de cauchos. “Estamos cansados de este problema; seguiremos protestando porque el Gobierno no resuelve los problemas ni le da respuesta al pueblo”, comentó la vecina.
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Corpoelec Amazonas informó en un comunicado en sus redes sociales que las fallas en el servicio se deben a problemas que se están solventando paulatinamente en la subestación San Gerónimo, en el estado Guárico.
Carlos Manzo, quien acompañaba a un paciente en el hospital José Gregorio Hernández, afirmó que desde que se fue la luz, en el hospital se activó la planta eléctrica y a las 3:30 am se acabó el gasoil; el centro de salud se quedó completamente a oscuras y quedó en riesgo la vida de los pacientes recluidos en la sala de cuidados intensivos.
Manzo detalló que tiene a un familiar en delicado estado y vivió momentos de angustia porque durante la madrugada los funcionarios de Protección Civil no pudieron resolver la situación al no tener gasoil adicional para volver a encender la planta.
“Gracias a Dios, durante el apagón no ocurrió nada que lamentar en el hospital. Es increíble que no encontraran gasoil para volver a encender la planta. Deben tomar con anticipación las medidas para lo que pueda faltar, porque en Amazonas lo de la luz es impredecible”, expresó.
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