En Centros Centinelas del estado Vargas se han registrado decesos que no son contabilizados en la data oficial. Foto Nadeska Noriega
La Guaira. La matrona guaireña Olga, cuyo apellido es omitido a solicitud de sus familiares, murió el pasado 15 de marzo cuando era tratada por COVID-19 en el Centro Diagnóstico Integral ubicado en la entrada del puerto de La Guaira en la parroquia Maiquetía. La causa de muerte que se aprecia en su acta de defunción es la falla multiorgánica por SARS – CoV-2, el nombre del virus que ocasiona el COVID-19.
Sin embargo, la muerte de Olga no forma parte de las estadísticas oficiales. Al cierre del mes de marzo de 2021, la Comisión Presidencial para la Atención al COVID-19, reportó un solo deceso en el estado Vargas, que la comisión denomina La Guaira. Un deceso reportado el 30 de marzo.
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“En medio del dolor uno no está pendiente de eso. De los anuncios. Pero es una burla no incluir el caso de mi mamá y de otros que fallecieron aquí en La Guaira. Y mi mamá murió por COVID. Salió positiva en el hisopado y además después que murió nos indicaron como era el protocolo. No nos dejaron velarla, sino directo a cremar. Entonces no entiendo por qué no dicen las cosas como son”, refiere el hijo de Olga, que no desea ser identificado.
El caso de Olga no es un hecho aislado en el estado Vargas. El Pitazo visitó centros centinelas, clínicas privadas, registros y conversó con familiares y médicos y logró confirmar otros 24 fallecidos en las áreas de COVID-19 y con reportes en sus actas de defunción, que no fueron contabilizados en la data oficial.
Estas muertes se registraron en el hospital Dr. José María Vargas de La Guaira (Ivss), en el Periférico de Pariata, en el CDI Puerto, en el hospital San José de Maiquetía y en el Centro Médico Provesalud de Catia La Mar. Es decir que en Vargas hubo 25 decesos relacionados con el COVID-19 y la comisión presidencial solo reportó una.
De acuerdo a las cifras suministradas por esta comisión, Vargas cerró el mes de marzo con un total de 1.669 nuevos casos, siendo la tercera entidad con más casos, precedida por el estado Miranda y el Distrito Capital, llegando a un total acumulado de 9.755 casos. Estas cifras la ubican como la entidad con más casos positivos por cada 100 mil habitantes.
“Durante el mes de marzo los casos activos comunitarios tuvieron un alza representativa, que ameritó la reactivación de hoteles sanitarios y las camas de atención en centros centinelas y clínicas privadas han estado al tope de su capacidad. La atención en los hospitales está saturada. En medio de esta realidad es lógico que los decesos también aumenten. Pero lamentablemente los protocolos se están aplicando de forma incorrecta y eso está afectando las estadísticas”, refiere la médica Geralldyne Aular, del equipo regional de Médicos Venezuela, señalando el deceso de la también especialista Xiomara Rodríguez, cirujana y traumatóloga, cuyo deceso el 23 de marzo, tampoco fue contabilizado.
Especialistas consultados explican que para confirmar un fallecimiento por COVID-19, el paciente debe tener la prueba PCR positiva. “Si el acta de defunción señala la presencia del virus, es una muerte que debe entrar a la estadística. No entendemos cómo se está manejando esta data”, refiere una fuente del Servicio Regional de Epidemiología, que solicitó no ser identificado.
Otros casos emblemáticos que fueron hechos públicos en la región, como la muerte de los docentes Olga Rondón, Marcos Yánez y el locutor Pedro Cabrera, tratados como pacientes COVID-19, que tampoco se incorporaron a la data.
El Pitazo solicitó información ante el Estado Mayor de la Salud en la región litoralense, para consultar la posible razón de esta discrepancia entre las cifras regionales y la data nacional, sin recibir respuesta.
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