Guarenas.- La unión de los venezolanos y la reconstrucción del país fueron las principales peticiones de Monseñor Gustavo García Naranjo, obispo de la Diócesis de Guarenas, Guatire y Barlovento durante la celebración de la Misa Crismal, este martes santo.
La celebración inició a las 10:00 a.m. en la parroquia Sagrado Corazón de Jesús, ubicada en Doña Menca de Leoni. Contó con la participación de 40 sacerdotes, diáconos, vicarios y catequistas de la diócesis.
«El mundo necesita de Dios y nosotros como sacerdotes debemos trabajar en fraternidad, siendo muestra de la unión necesaria que requiere nuestro país para superar todas las adversidades que nos aquejan», manifestó Monseñor Gustavo García Naranjo durante la homilía.
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Agregó: «todos los que estamos aquí nos hemos enfrentado a la falta de comida y medicinas, a la falta de agua y ahora las constantes fallas eléctricas. Reconozcamos a Cristo como nuestro salvador y pidamos la fortaleza para superar esta crisis y que nos guíe para que juntos logremos la transformación y reconstrucción de Venezuela».
La feligresía colmó la iglesia de Menca de Leoni, para acompañar la bendición de los santos óleos y el crisma, símbolos con los que se unge a los enfermos y a los bautizados.
A las 12:00 p.m., cuando culminó la comunión y antes de la bendición final, se fue la luz en Guarenas, como parte del racionamiento diario aplicado por Corpoelec en esta zona, a pesar de no estar incluida en el cronograma de racionamiento publicado recientemente.
La misa crismal terminó sin sonido y con la poca luz natural que ingresa en la iglesia Sagrado Corazón de Jesús, en Menca de Leoni.
