Los jubilados de Petróleos de Venezuela (Pdvsa) y de otras instituciones públicas, además de líderes sindicales de distintos sectores y trabajadores activos, se concentraron este jueves, 10 de diciembre, en Plaza Caracas, para exigir respeto y justicia para los empleados públicos del país.
Las exigencias de este grupo fueron entregadas en un pliego de reclamo conjunto a la Vicepresidencia de la República el 5 de octubre de 2019 y no fue sino hasta un año y dos meses después que fueron convocados por esta instancia para ser escuchados.
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“Nosotros no estamos pidiendo comisiones, ni mesas de trabajo ni nada por ese estilo. Nosotros estamos pidiendo respuesta al petitorio que introdujimos en octubre del año pasado, además de las reiteradas reuniones que hemos mantenido porque nos dicen que tenemos una reunión hoy y nosotros no queremos más mesas de trabajo”, indicó Arnaldo Méndez trabajador del Hospital Universitario, quién responsabilizó a Nicolás Maduro de los salarios miserables y de la falta de contratos colectivos que amparen a los trabajadores.
“Maduro usted es el responsable de la pérdida del poder adquisitivo de los trabajadores venezolanos”, dijo a los medios de comunicación.
En el Día De los Derechos Humanos, estos trabajadores que salieron a las calles reiteraron que su petición no solo es por salarios justos, sino por libertad sindical, empleos dignos, una vejez sin contratiempos y salud para los empleados de las instituciones del Estado.
“Se nos está muriendo la gente sin gozar eso por lo que tanto trabajaron”, indicó Carlos Salazar, presidente de la Coalición Sindical Nacional. El dirigente refirió que piden la liberación de trabajadores y dirigentes privados de libertad por alzar la voz y recordó que es una política de Estado la persecución de quienes se quejan.
“Que liberen a Guillermo Zarraga, a Bartolo Guerra, a Ronny Álvarez y tantos otros… Queremos que vean que el salario está en 0,36 centavos de dólar. La gente se muere y con esos salarios ahora morimos también de hambre por o que venimos a exigir respuesta”, aseguró Salazar, quien insistió en que en Venezuela no habrá Navidad, pues los maestros, los jubilados, los trabajadores de la salud e instituciones públicas seguirán en las calles hasta que obtengan una respuesta de las autoridades.
Margot Monasterio, trabajadora del sector salud fue otra de las participantes en la protesta. Destacó la burla que ha representado para los empleados públicos la falta de respuesta del gabinete de Maduro, ante las quejas del sector.
“Los rectores del TSJ no han acatado la sentencia que ganamos a las autoridades del poder electoral. No se entiende este país, los trabajadores estamos viviendo una situación crítica, todos estamos iguales en cuanto al nivel de vida”, destacó un extrabajador de Pdvsa, haciendo referencia a la homologación de los salaros de los jubilados de este sector.
Por su parte, el gerente de la asociación de jubilados de Pdvsa, José Castillo, puntualizó que se trata de 31.000 jubilados que entregaron su vida a esta empresa y ahora esperan el pago del fondo de pensiones que les adeuda el Estado y cuyo monto asciende a 7 millardos de dólares, calculados desde el año 2014.
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“Somos personas de 70 años en adelante que entregamos la vida a esta empresa y a diario se nos mueren hasta siete viejitos en las regiones”, apuntó Castillo. El líder de los jubilados de Pdvsa aseguró que en varias ocasiones las comisiones presidenciales con las que se han reunido les prometen que pronto tendrán una fecha de pago que no llega y que siguen esperando un encuentro con Delcy Rodríguez.
Este 10 de diciembre los manifestantes tampoco fueron recibidos por las autoridades de la Vicepresidencia de la República y aseguraron que seguirán protestando hasta ser atendidos y obtener respuestas satisfactorias.
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