El rescatista fue auxiliado por sus compañeros de buceo y funcionarios de los cuerpos de seguridad costera, pero falleció cuando era trasladado al hospital / Foto cortesía Bomberos Náuticos de Higuerote
Higuerote.- El rescatista Armando Luis Morante Gómez, de 42 años de edad, falleció durante la tarde del miércoles 11 de noviembre tras sufrir un accidente por descompresión mientras participaba en las labores de búsqueda del buzo pescador desaparecido en aguas profundas de Higuerote, en el estado Miranda.
La información fue confirmada por el Mayor Manolo Ollarves, comandante de la División Náutica de los Bomberos del estado Miranda.
Morante Gómez también era buzo e instructor de buceo y apnea. Era amigo de Héctor Armando Cisneros Mora, el buzo pescador que desapareció el lunes 9 de noviembre mientras practicaba pesca submarina a pulmón en las cercanías del Farallón Centinela, un islote de roca ubicado a 25 kilómetros del Cabo Codera, en Higuerote.
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El miércoles era el segundo día de búsqueda. Morante, junto a un equipo de buzos, participó en las actividades planificadas por el grupo de rescate y salvamento bajo lineamientos de los cuerpos de seguridad costera.
Aproximadamente a 20 metros de profundidad, los buzos que lo acompañaron en la inmersión notaron que había dejado de expeler burbujas del aire exhalado de su respiración, por lo que hicieron señales para que subieran la cuerda de seguridad a la que estaban atados.
Al salir a la superficie, el rescatista estaba inconsciente; fue llevado por los Bomberos Náuticos y personal de Protección Civil a tierra firme en la bahía de Puerto Francés, donde le practicaron reanimación cardiopulmonar (RCP). Sin embargo, mientras era trasladado en ambulancia al Hospital General de Higuerote, falleció. Al centro asistencial ingresó sin signos vitales.
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De acuerdo con el portal intermundial.es, la enfermedad por descompresión es causada por la formación de burbujas de nitrógeno en nuestro cuerpo debido a la alta presión durante las inmersiones.
En tierra, el cuerpo humano expulsa el nitrógeno, pero bajo el agua es asimilado y pasa a la sangre por efecto de la presión, por lo que debe ser expulsado a través de la sangre antes de estar en superficie.
El tiempo de exposición, la profundidad, la temperatura y el riego sanguíneo, entre otros factores, influyen en el grado de saturación de nitrógeno alcanzado.
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