Foto: Referencial - Prensa Cicpc.
Los Teques.- Familiares de los detenidos en la sede del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) ubicada en Los Teques, capital del estado Miranda, denuncian que los presos están hacinados y que el lugar es un foco de contagio de COVID-19, luego de confirmarse que dos de ellos dieron positivo en las pruebas PCR.
El grupo denunció, a través de la ONG Una Ventana a la Libertad, que no se han realizado pruebas de descarte de la enfermedad a los 244 detenidos que están en esta sede. “Hacemos un llamado al director del Cicpc, Douglas Rico, para que vele por que se cumplan los protocolos de seguridad en estos centros de detención”, dijo Raima Márquez, tía de uno de los detenidos.
La semana pasada a dos internos y ocho funcionarios de la Delegación Municipal se les diagnosticó COVID-19. “Estoy casi segura que hay más; adentro esos presos tienen diarreas con sangre, tos, fiebre alta y nadie hace nada por su salud”, agregó.
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Explicó que su sobrino tiene antecedentes de tuberculosis. “Nunca lo sacaron ni le hicieron exámenes, y cuando estaba enfermo lo llevaron solo a un CDI donde una médico cubana le mando un tratamiento, pero igual continuaba con fiebre alta y sin poder respirar”.
De acuerdo a los datos aportados por familiares, hay varios casos de jóvenes detenidos con enfermedades contagiosas como tuberculosis. Uno de ellos es del sobrino de Márquez, un joven detenido por robo agravado que ha sufrido cuadros febriles y tiene que dormir en el piso. “Eso ha sido horrible; se le pasó una cobija para que la pusiera en el piso y durmiera ahí. Le mandamos tapabocas y guantes, pero nunca quisieron llevarlo al Hospital Victorino”.
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Trascendió que en la sede policial no hay funcionarios para trasladar a centros de salud a aquellos de los 244 detenidos que presenten dolencias o enfermedades.
A diario le llevan té caliente y café. “Entre todos comparten, pero es terrible lo que están viviendo, hacinados ahí adentro”, dijo.
Agregó que fueron a la Defensoría del Pueblo y los delegados de defensa no prestaron atención a sus denuncias.
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