Foto: Archivo/cortesía
Caracas.- Ante la constante actividad sísmica que se ha sentido en diversas entidades del país durante la última semana, el profesor de Geofísica de la Universidad Central de Venezuela (UCV) y la Universidad Simón Bolívar (USB) Michael Schmitz destacó que es algo completamente normal debido al constante movimiento de las placas tectónicas. “Los movimientos de las placas son continuos; los movimientos lentos en algún momento rompen la resistencia y se mueven más”, señaló Schmitz a El Pitazo.
El especialista coloca como ejemplo el sismo registrado el año pasado en Macuro, en el suroeste de la península de Paria, estado Sucre, y que registró una intensidad de 4,9 grados de magnitud. Sobre este hecho señaló que pudo tratarse de un movimiento de tan solo 10 centímetros entre las placas en una franja de varios kilómetros. “Esos movimientos generan vibración”, enfatizó. En este sentido, recordó que en Venezuela se registran unos 1.000 sismos menores cada año, lo que da un promedio cercano a los 3 movimientos telúricos por día.
De acuerdo con cifras de la Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas (Funvisis), en los últimos 17 días de han registrado 20 sismos, con magnitudes que varían entre los 2,5 y los 4,8 grados, y con profundidades tan bajas como los 80 kilómetros.
A esa profundidad, un sismo parecería indetectable para el cuerpo humano, pero mientras más cerca están de la superficie, es más fácil que se noten, como los que han ocurrido esta semana: en Mérida el 1 de septiembre, de 3,4 grados de magnitud y con profundidad de 5 kilómetros, y el del 30 de agosto en Barquisimeto, con la misma profundidad, pero de 2,6 grados.
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