Alfredo Infante, padre de la parroquia San Alberto Hurtado de La Vega, pidió refugiarse en la oración para superar los miedos después de los enfrentamientos armados en la Cota 905. Foto: Archivo referencial
Caracas.- Alfredo Infante, padre de la parroquia San Alberto Hurtado de La Vega, recomendó a las comunidades afectadas por los enfrentamientos armados en la Cota 905 a construir espacios donde las personas puedan superar sus miedos ante este tipo de eventos.
A través de un audio que se difundió por WhatsApp, Infante manifestó que después de vivir tres días de tiroteo en la Cota 905 entre bandas criminales y funcionarios de seguridad del Estado venezolano, es importante conversar entre familias y vecinos sobre sus miedos e indignaciones para saber procesar el duelo a través de la oración.
“El llamado de nuestro Señor es a seguir apostando por la paz y ayudar a sanar las heridas psicológicas de nuestros hermanos”, expresó el sacerdote.
Además, Alfredo Infante destacó que hoy más que nunca, los venezolanos necesitan solidarizarse entre sí para fortalecer el amor y construir una mejor convivencia.
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Por otro lado, indicó que incluyó en sus oraciones a las familias que fueron desplazadas por las balaceras registradas en la Cota 905 y zonas aledañas. También rezó por el descanso eterno de aquellas personas que murieron por una bala perdida en medio del choque entre policías y miembros de las bandas lideradas por el Koki, el Vampi y el Garbis.
Alfredo Infante expresó el pasado mes de junio, que La Vega se convirtió en un campo de batalla, provocando que muchas personas viven aterrorizadas.
Aseguró que la violencia armada hace la vida de los ciudadanos venezolanos más cuesta arriba. Por lo tanto, invitó a las personas a orar, también a trabajar por la paz, y a proponerse a hacer de La Vega una parroquia modelo de convivencia pacífica.
“A los jóvenes que han asumido el camino de las armas, quiero darte mi palabra para que recapaciten y desistan de la violencia y pongan todas sus energías juveniles en construir la paz, que es el propósito que Dios quiere para su pueblo”, manifestó el párroco.
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