Diez niñas y adolescentes fueron víctimas de Maicol Jesús Machado Monasterios, un joven de de 21 años que usaba sus redes sociales para captar a niñas y jóvenes con el fin de obtener fotos de ellas en ropa interior. Las imágenes las usó para extorsionarlas, pues si no tenían relaciones sexuales con él, las difundía en redes sociales. La División de Delitos Informáticos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) hace un llamado a los padres a revisar las redes y dispositivos de sus hijos para evitar que sean posibles víctimas.
Machado fue detenido el 17 de junio por funcionarios del Cicpc del estado Miranda. El hombre tenía como blanco a las infantes residentes de la población de Higuerote. Una de ellas denunció lo que el joven le estaba haciendo y fue capturado. La Fiscalía del estado Miranda le imputó los delitos de sextorsión, grooming (acicalando), sexting (envío de material sexual, erótico o pornográfico) y ciberacoso.
De acuerdo con la información oficial, Machado se valía de sus redes sociales (Instagram y Twitter) para hablar con niñas y jóvenes. No usaba su nombre, sino seudónimos y fotos de otros jóvenes.
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Este caso no es una novedad; es una manera de actuar llamada groomig. El jefe de la División de Delitos Informáticos del Cicpc, Pavel Uzcátegui, informa que «los pedófilos y pederastas se mimetizan con perfiles de niños y niñas para capturar víctimas, en su mayoría entre 7 y 18 años de edad». Uzcátegui hace un llamado a los padres y representantes para que revisen las redes y dispositivos de sus hijos y para enseñarles el uso consciente de las redes sociales y sus límites.
Lo que hizo Machado contra esas 10 niñas se conoce como grooming, un delito que se define como el acercamiento de adultos a niños y jóvenes para ganar su confianza, crear lazos emocionales y poder abusar de ellos sexualmente. En el peor de los casos, los que lo cometen tienen el fin de introducir al menor en ambientes de prostitución y explotación sexual. En Venezuela este delito se paga con seis y hasta ocho años de prisión.
El grooming puede darse a través de internet o en persona, tal como lo ejercía Gerardo Enrique Oliveros Taborda, de 50 años, quien fue detenido el pasado 14 de junio en Maracaibo, estado Zulia, por violar, presuntamente, a unos 100 niños y adolescentes, todos varones, a excepción de una niña de 14 años. El hombre se acercaba a ellos y les ofrecía llevarlos de viaje a una granja donde había una piscina. Les ofrecía juegos, dinero, celulares, meriendas y drogas.
La presidenta de la Asociación Venezolana para una Educación Sexual Alternativa (Avesa), Mercedes Muñoz, detalló que la única forma de que niños y jóvenes esquiven ser víctima de este delito es que sus padres los protejan y se eduquen entre todos. Para Muñoz la denuncia es fundamental, y la misma recomendación la dan funcionarios del Cicpc, quienes indicaron que todo infante que esté pasando por esta situación debe ir a una sede policial y denunciar a su agresor.
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