Cuando llega la temporada navideña a las familias con integrantes gatunos, comienza la ansiedad y estrés pre y post decoración del árbol de Navidad. Para los gatos es una tentación no tumbarlo, dañarlo y desordenarlo, pues ven en el un punto de distracción.
En ocasiones, los padres de gatos optan por no adornar los espacios de la casa porque es mayor el tiempo que dedican a colocar las bambalinas y peluches de nuevo en su lugar, que el animal en repetir el ciclo del desastre.
Dado que en plataformas como Youtube abundan videos con recomendaciones para evitar que los mininos se acerquen al pino, El Pitazo contactó al médico veterinario Otto Alvarado, con más de 27 años de experiencia, para constatar cuáles son las herramientas que pueden implementar los dueños de mascotas en estas fechas.
Utilizar canela, conchas de cítricos o vinagre de manzana para alejar al felino rara vez cumple con el cometido. ‘‘Hay olores que les son desagradables, pero generalmente no funcionan. Sé que la cebolla funciona, pero tener un árbol de Navidad con ese olor dudo que sea agradable’’, señala el especialista.
Dejando de lado los remedios caseros, Alvarado enumera cuatro soluciones:
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