Los padres estuvieron toda la jornada a las afueras de la sede del Saime en Los Teques | Foto: Pola Del Giudice
Los Teques.- Llegaron entre las 3:00 am y 4:00 am del lunes 25 de enero. Al menos 140 niños y sus representantes tienen meses esperando poder cedularse, tras cumplir la edad requerida para el trámite de identificación: requisito obligatorio para poder sacar pasaporte o inscribirse en el colegio a partir de quinto grado de educación básica.
La fila fue haciéndose cada vez más larga, a las puertas del edificio Maracaibo, en la calle Carabobo de Los Teques, capital del estado Miranda, donde está ubicada la sede del Servicio Administrativo de Identificación Migración y Extranjería (Saime) en esta localidad.
Al pasar de las horas se empezó a sentir la desorganización por parte del ente de identificación. La gente comenzaba a aglomerarse a las puertas del organismo. Los niños pasaban con sus padres, quienes entregaban la documentación y luego debían salir, dejando a los niños solos en la sede para continuar el proceso. De acuerdo con reportes nacionales, el operativo fue similar en todas las sedes nacionales.
Pasadas las dos de la tarde, los padres comenzaron a preocuparse. Ya a esa hora los niños tenían cinco horas dentro de la sede y no habían comido ni tomado agua. “Pedimos a los funcionarios que nos dejaran pasar para ver cómo estaban los niños y la respuesta fue negativa, además indicaron que no podía salir ningún niño hasta terminar el trámite que estaba en proceso”, dijo Miriam Gómez, a las puertas de la sede, cerca de las cuatro de la tarde, del lunes 25 de enero.
La tarde comenzó a caer, el desespero de los padres comenzaba a aumentar. Funcionarios de la Policía del estado Miranda y Policía del municipio Guaicaipuro tuvieron que acercarse al lugar para mantener el orden y resguardar a los presentes. La calle tuvo que ser cerrada para el tránsito vehicular, en virtud de que unas 200 personas estaban a las puertas del Saime aguardando la salida de los niños al terminar el trámite de identificación.
Al llegar la noche, alrededor de las 10:30 pm, los niños seguían dentro de las instalaciones sin tener contacto de sus padres y la mayoría sin comer. “El Saime nos negó la entrada de los padres y el pase de comida a nuestros hijos”, dijo una mujer.
Los padres aseguraron que los niños estaban con hambre, nervios, crisis de asma y llanto. Incluso, un padre tuvo que entrar porque a su hijo le dio una baja de azúcar.
Entre las razones que ofrecieron los trabajadores del Saime sobre la tardanza es que el proceso estaba presentando fallas por el sistema de conexión con la sede central y no había posibilidad de cerrar los trámites, debido a que luego los niños no podrían cedularse en ninguna jornada.
Desde las seis de la tarde, el secretario de Seguridad Ciudadana de Guaicaipuro, detective jefe (Cicpc) Carlos Andrade, llegó al lugar para mediar y dar respuesta a los padres que aguardaban a los niños. “Tuvimos monitoreo durante toda la jornada y canalizamos el retorno de los padres y niños a sus casas”, agregó.
No fue sino hasta las 2:30 am cuando salió el último niño del lugar. Autoridades del Saime relataron que este martes 26 solo atenderán a 150 niños.
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