Caracas.- El diseñador cubano-estadounidense, Osmel Sousa, salió al pasó ante las críticas sobre su asistencia a la fiesta sobre la cima del Kusari tepuy y que puso en riesgo la biodiversidad de las célebres mesetas ubicadas en el Parque Nacional Canaima, estado Bolívar.
A través de su cuenta de Instagram, Sousa publicó un video en el que justifica su asistencia al evento en el que se celebraba el cumpleaños número 50 del empresario Rafael Oliveros.
«Cuando a mí me invitaron a Canaima, no dudé en decir que sí, porque Canaima se ha convertido en uno de mis lugares favoritos desde el año pasado que hice un programa allí (…) y sería incapaz de hacer algo que lo destruya«, comenzó diciendo en el clip y además indicó que pese a que otras personas le pidieron no hablar, decidió hacerlo.
Afirmó que a la fiesta, a la que también asistieron otras personalidades como Titina Penzini, Aura Marina Hernández y otros invitados, es una forma de turismo ecológico.
«Siempre va mucha gente a Canaima y hace turismo ecológico sin dañar la naturaleza, pues nosotros hicimos lo mismo. Lo único que le da rabia a la gente es que fuimos de smoking y traje de gala, pero ahí no pasó nada«, insistió.
«Si a ustedes los llaman para invitarlos a una fiesta en Canaima, ¿van a decir que no? Y este que está aquí, si lo vuelven a invitar, iría otra vez», concluyó en su mensaje.
La ONG SOS Orinoco denunció que este tipo de viajes con celebraciones en Canaima, violan los reglamentos que están diseñados para proteger justamente la fragilidad ecológica de este lugar único en el planeta.
«El impacto humano por actividades irresponsables y que además están prohibidas tienen un efecto, no solo duradero sino probablemente imposible de remediar en una escala de tiempo humana«, explicó en un comunicado.
En la cumbre del Kusari Tepuy «crece una vegetación de herbazal, única de estas montañas tabulares del Escudo Guayanés», que está «caracterizada por especies de gran valor científico».
«Estos herbazales crecen sobre suelos extremadamente pobres y rocosos, lo cual los hace muy sensibles y de difícil recuperación una vez impactados. Son muy susceptibles a los incendios, al pisoteo, a los desechos orgánicos, y es por eso que toda actividad en principio debe estar prohibida», detalló.
Este viernes, 11 de febrero, una comisión del Ministerio de Ecosocialismo de Venezuela llegó al Parque Nacional Canaima y voló hasta la cima del tepuy Kusari para evaluar los daños ecológicos ocasionados por los invitados a la fiesta que se realizó en la milenaria cumbre.