El integrante del Partido Republicano y miembro de la Cámara de Representantes no se adelanta a vaticinar quién ganará las elecciones de Estados Unidos en noviembre, pero advierte que de triunfar el candidato demócrata Joe Biden, “se retornará a la política de apaciguamiento” hacia los regímenes de Cuba, Nicaragua y Venezuela.
Entrevista: César Batiz | Redacción: Gabriela González
Mario Díaz-Balart, miembro de la Cámara de Representantes de Estados Unidos por el Partido Republicano, fue uno de los principales críticos del gobierno de Hugo Chávez en su momento, y ahora también cuestiona al régimen de Nicolás Maduro.
Tras año y medio de la instalación del gobierno interino de Juan Guaidó en Venezuela, y después de ser consultado acerca de las razones por las cuales no ha funcionado la estrategia que ha implementado el Gobierno de Donald Trump para desplazar a Maduro, Díaz-Balart recuerda que, además de Cuba, Rusia y China están involucradas con la gestión madurista.
Para Díaz-Balart hay dos opciones bien claras con respecto a Latinoamérica: o se incrementa la presión contra las dictaduras de la región, que es lo que sugiere, o se regresa a la política de ayudar a esos gobiernos opresores alegando que esto, de alguna forma, representa un beneficio para los pueblos que esos regímenes están reprimiendo.
El político estadounidense, en una entrevista con el director de El Pitazo, César Batiz, considera que el presidente Trump es “el mejor aliado para los pueblos de Cuba, Nicaragua y Venezuela”, por eso tiene la seguridad de que “la dictadura de Nicolás no sobrevive a cuatro años más de la presidencia de Trump”.
–¿Qué lugar ocupa Venezuela en la agenda de campaña del presidente Trump?
–Es interesante porque para la administración Trump el tema Venezuela no ha sido un tema electoral. Ha sido un tema de política exterior. Fue el primer mandatario en reconocer al presidente Guaidó y presionó, a través de todos los esfuerzos diplomáticos, a los países aliados a hacer la misma cosa, a ayudar al gobierno legítimo interino.
Segundo, ha impuesto sanciones extremadamente severas. No solamente contra el régimen y particularmente contra Maduro, así como contra quienes lo rodean, sino contra la familia de Maduro. Si fuesen capturados por cualquier institución internacional tendrían que ser juzgados aquí, en las cortes de los Estados Unidos. Eso es muy severo, muy serio y el contraste con respecto a la actitud del pasado presidente (Barack Obama) y del vicepresidente Biden no puede ser más dramático.
Cuando estaba Biden en la vicepresidencia, continuamente la administración se estaba reuniendo primero con Chávez y luego con Maduro y Cabello. Eran reuniones públicas y continuas para demostrarle apoyo al régimen. De hecho, el vicepresidente Biden ha dicho que él regresaría a la política del expresidente Obama, de ayudar al régimen de (Raúl) Castro, que es el que está dando las órdenes en Venezuela.
Entonces, esto no es una cuestión electoral. Estamos trabajando, luchando y ayudando a ese valiente pueblo de Venezuela para que recupere su libertad. Sería destructivo para esta agenda la elección de la izquierda en Estados Unidos, que públicamente ha dicho que va a regresar a la política que existía antes.
¿Y esa política, cuál era? La foto de Biden y los funcionarios más altos de Maduro y Chávez. Ha dicho el exvicepresidente Biden que regresaría y quiere regresar a esa política de ayudar, de apaciguar a los enemigos de la democracia en este hemisferio. No solamente a Maduro y a Castro también a (Daniel) Ortega, y eso sería mortal para el hemisferio.
Yo estoy convencido de que Venezuela va a ser libre. Las dictaduras en este hemisferio, la de Maduro; la de Castro; la de Ortega, no sobreviven a otros cuatro años de la presidencia del señor Trump. Es una cuestión de sobrevivencia para las democracias en este hemisferio.
Yo estoy convencido de que Venezuela va a ser libre. Las dictaduras en este hemisferio, la de Maduro; la de Castro; la de Ortega, no sobreviven a otros cuatro años de la presidencia del señor Trump
Congresista republicano por Florida
–En febrero, a raíz de la visita de Guaidó a Estados Unidos, usted decía que esperaba que este año hubiesen elecciones libres para Venezuela. Se anuncia que las elecciones serán el 6 de diciembre, unas elecciones parlamentarias con un CNE designado por el TSJ, con partidos intervenidos por el TSJ a tal punto que el día de hoy (jueves), la Alta Comisionada para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, hizo una actualización del informe sobre Venezuela y destaca este aspecto. Entonces, ¿qué ha fallado en la política del presidente Trump hacia Venezuela? ¿Qué ha fallado en la oposición venezolana para que ese propósito de elecciones libres no se haya logrado en Venezuela?
–He sido muy claro diciendo que no es sostenible el régimen de Maduro, contando con que siga la presión de los Estados Unidos. No recuerdo haber dicho una fecha porque siempre he sabido que esto es algo muy difícil. He estado en esta lucha, comenzando cuando estaba Chávez en el poder, y lo que he dicho es que este régimen es insostenible, que este régimen se va a venir abajo siempre y cuando a la Casa Blanca no llegue una administración que haga lo posible por ayudar al mandato de Maduro, que es lo que estaba haciendo la administración cuando Biden era vicepresidente.
Entonces, ¿qué ha fallado? Ha habido momentos muy importantes en esta travesía. Todos pensábamos que había una oportunidad histórica al comienzo, pero también siempre he dicho que esto va a ser algo muy difícil. ¿Por qué? Porque Castro no puede permitir que Maduro se caiga y sabemos que las órdenes de Maduro vienen de La Habana. Sabemos que quienes lo rodean, el equipo de seguridad de Maduro, son cubanos y, por lo tanto, cuando el exvicepresidente Biden dice que él quiere ayudar y darle legitimidad y financiamiento al régimen de Castro, eso significa ayudar y darle financiamiento a los que están manteniendo a Maduro en el poder.
Por lo tanto, estamos viendo que cada día hay más presión por parte de los Estados Unidos y de nuestros aliados. Vemos ahora que hasta la Unión Europea está presionando, está sancionando a funcionarios de alto nivel de Maduro. Eso es algo que nunca habíamos visto en el pasado. A los europeos siempre les cuesta hacer algo en concreto. Pero eso es algo que está pasando por la presión de los Estados Unidos y, repito, si sale electo el vicepresidente Biden en los Estados Unidos, eso garantiza que Maduro, que Ortega y que Castro se mantengan en el poder.
Eso no lo digo yo, eso lo ha dicho el mismo Biden. Si amamos la libertad y queremos ayudar a los pueblos de este hemisferio a liberarse, y si queremos proteger la seguridad nacional de los Estados Unidos, no podemos regresar a la política de apaciguamiento, de asistencia a las dictaduras de este hemisferio.
Estamos hablando de un momento histórico, sumamente importante y sería una tragedia regresar a esa política de apaciguamiento y darse la mano, para no decir algo más vulgar, entre los Estados Unidos y las dictaduras de este hemisferio.
En el caso de Venezuela hay que incrementar la presión, seguir coordinando con el presidente constitucional y legitimo, el presidente Guaidó. No solamente presionar al régimen en Venezuela sino también seguir presionando como lo está haciendo la administración Trump
Congresista republicano por Florida
–La semana pasada entrevistamos a Leopoldo Martínez, venezolano estadounidense que es miembro del Comité Nacional del Partido Demócrata y apuntaba, al criticar la política de Trump, a dos aspectos: la cubanización del conflicto venezolano y el abandono del esfuerzo diplomático por parte de Trump. ¿Qué opina usted al respecto?
–Con todo respeto, acuérdense del tema de los tontos útiles. Decir que ahora Venezuela se ha cubanizado es no reconocer la realidad de que ha habido varios miles de agentes cubanos en Venezuela por décadas. Eso no lo digo yo, lo dicen todos los reportes públicos y no públicos, lo ha dicho el secretario general de la OEA (Luis Almagro) y parece que este individuo, que no conozco, no se ha enterado de la realidad de que agentes cubanos están allá desde hace décadas.
Creo que ese tema que ha dicho, cualquiera con algún tipo de sentido común sabe la realidad. ¿Qué el presidente ha abandonado el tema de Venezuela? Si hemos visto las sanciones adicionales recientemente; hemos visto las sanciones no solamente en contra de los funcionarios del régimen de Maduro; hemos visto las sanciones en contra de la compañía de petróleo rusa (Rosneft); hemos visto sanciones en contra de los capitanes de los buques que transportan el petróleo. Hemos visto acciones muy serias y eso es un contraste dramático con lo que el vicepresidente Biden hizo y dice que quiere volver a hacer, cuando él estaba en el control de la política sobre Venezuela y Cuba.
–Representante, pero el punto no son las sanciones, las sanciones existen y por lo que dijo el entrevistado la semana pasada, continuarán con un posible gobierno de Biden.
–Eso no lo ha dicho Biden. Y este individuo dice que ahora está la cubanización de Venezuela sabiendo que eso no es algo nuevo, y al mismo tiempo está apoyando cuando el señor Biden está diciendo que quiere regresar a la política acerca de Cuba para darle legitimidad.
Repito, yo no lo conozco, pero hay que ser o malintencionado o mal informado para no saber que Cuba lleva décadas involucrada en Venezuela, de no saber cuál es la política de Biden, que él anunció públicamente respecto a Cuba y sabiendo lo que eso significa para Venezuela y Nicaragua.
Por lo tanto, la pregunta es muy sencilla, ¿se quiere regresar a la política de ayudar y apaciguar? Recordemos las reuniones de Obama con Chávez y Maduro, las fotos, ¿queremos regresar a eso?
–Sobre lo publicado por el embajador Bolton en su libro The Room ¿Qué tanto influyen Rusia y el presidente Putin en el presidente Trump? ¿Puede cambiar la política de Trump hacia Venezuela por influencia de Putin?
–Cuando estaba el presidente Obama y el vicepresidente Biden en la Casa Blanca hicieron la política pública. En inglés dijeron reset, esa imagen con el botoncito rojo, para ayudar a Rusia y restablecer relaciones, y es irónico que los que públicamente hicieron todo lo posible para ayudar y promover a Putin, ahora digan que Trump está aliado con Putin.
Hubo una investigación de tres años, y por cierto la hemos visto porque es pública, donde altos funcionarios de la administración de Obama, privadamente y bajo juramento, dijeron que no había ningún contacto entre Trump y los rusos, pero públicamente le estaban mintiendo al pueblo diciendo que sí había contacto.
Eso ha sido desmentido de una forma absoluta. Ahora, lo que sí sabemos es la relación íntima, porque eso fue público. La política de Obama y de Biden fue reconocer a Rusia después que invadió a Ucrania. Invitaron públicamente a que Rusia interviniera en Siria y hemos visto los resultados de eso. La administración que estuvo con Rusia fue la administración de Obama y Biden.
¿Obama y Biden alguna vez sancionaron alguna entidad rusa? ¿Alguna vez sancionó a la compañía petrolera rusa que estaba negociando (Rosneft) y robando el patrimonio a Venezuela? Nunca pasó. Vamos a estar claros, vamos a no confundir la realidad con lo que dicen los funcionarios de Biden.
Y lo que ha salido después del libro del embajador Bolton, que no he leído, según los reportes de prensa es que una de las razones por las que el presidente Trump estaba enojado con Bolton es porque éste no quería ser tan agresivo como Trump en el caso de Venezuela. Yo no sé si eso es cierto, pero es lo que ha sido reseñado en la prensa. Lo que sí sé es lo que ha hecho el presidente Trump; lo que sí sé, es la continua presión del presidente Trump y lo que también sabemos es lo que hizo el señor Biden cuando estaba en el poder, en la Casa Blanca.
Esta administración ha cometido errores pero en el caso de Venezuela, de Cuba, de Nicaragua, no hemos tenido mejor aliado para la causa de la libertad que esta administración.
Yo soy uno de los patrocinadores para asistir, dar un estatus legal a los venezolanos que están en los EE. UU. Eso sabemos que se ha estancado totalmente por la realidad que existe hoy en día. Pero eso es una asignatura pendiente que tenemos que lograr.
Congresista republicano por Florida
–Usted como congresista hispano, ¿qué recomendaciones haría al presidente Trump para atender la situación de los venezolanos en Venezuela y la situación de los venezolanos en Estados Unidos?
–En el caso de Venezuela hay que incrementar la presión, seguir coordinando con el presidente constitucional y legítimo, el presidente Guaidó. No solamente presionar al régimen en Venezuela sino también seguir presionando como lo está haciendo la administración Trump, a los que están ayudando, de cualquier forma, a financiar a ese régimen gangsteril de Venezuela y seguir haciendo mucho más, públicamente y privadamente, para ayudar a esa causa de libertad del pueblo venezolano.
El pueblo venezolano ha demostrado un patriotismo, un heroísmo realmente ejemplar.
Número dos, yo soy uno de los patrocinadores para asistir, dar un estatus legal a los venezolanos que están en los Estados Unidos. Eso sabemos que se ha estancado totalmente por la realidad que existe hoy en día. Pero eso es una asignatura pendiente que tenemos que lograr. Hemos estado en conversaciones con la administración pero ahora hay otras cosas que obviamente son la prioridad de los Estados Unidos y del mundo, pero yo sigo comprometido con ese tema.
No solamente con los venezolanos sino también con otros latinoamericanos que están allí en los Estados Unidos sin papeles. Yo creo que hay que entrar en un proceso de legalización, obviamente manteniendo el Estado de Derecho de los Estados Unidos, pero es algo que se puede lograr, yo he trabajado de una forma bipartidista con algunas personas para lograrlo.
Yo estoy convencido que esta dictadura en Venezuela o la de Cuba o la de Nicaragua no sobreviven otros cuatro años de una administración del presidente Trump.
Yo tengo mil diferencias con la administración del presidente Trump, pero cuando estamos hablando de la seguridad nacional de los Estados Unidos y particularmente cómo se está aportando en ayudar a la causa de la libertad en este hemisferio, allí no hemos tenido mejor aliado.
Regresar a la política de Obama y Biden, que es la de ayudar a estas dictaduras, sería mantenerlas para siempre. Eso no solamente sería inaceptable para esos pueblos que están sufriendo sino que también sería un peligro para la seguridad nacional de los Estados Unidos. Para mí eso es una prioridad y para el exilio venezolano como el cubano y el nicaragüense, si nosotros no apoyamos al que nos está ayudando en esta causa, nos merecemos lo que nos va a tocar.
–De acuerdo con las encuestas el presidente Trump está por debajo de la intención de votos de Biden, ¿Usted confía en que Trump remontará y ganará la elección de noviembre?
–Yo no sé quién va a ganar en noviembre, lo que sí sé es que hasta noviembre es una eternidad. Estamos viendo, por ejemplo ahora, cambiando un poco el tema, que la economía está comenzando a crear empleos una forma inesperada por muchos. Esa es la política de los republicanos y la política de la administración. Si regresamos a la anterior política económica que existía antes, vamos a regresar a un país sin empleos ni oportunidades.
Para la prosperidad de este país, para la libertad de este hemisferio no podemos regresar a la administración de Biden. ¿Qué va a pasar en noviembre? Eso lo determina un grupo: el electorado de este gran país como debe ser.