San Cristóbal. “El caos que se está viviendo es inhumano”, dijo Leonardo Figueroa, presidente de la Asociación de Ganaderos del estado Táchira (Asogata).
La afirmación recoge su sentir sobre la realizadad del sector tras el apagón que se inició el lunes 25 de marzo en la zona norte del estado y que al mediodía de este miércoles 27 de marzo aún continuaba.
Los productores tenían almacenada la leche que posteriormente venderían y llevarían a las queseras, pero al momento del corte eléctrico quedaron con el líquido parado por no tener cómo transportarlo.
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Los productores de la zona norte del Táchira estiman que se dañaron 100 mil litros de leche en sus fincas por no tener cómo refrigerarla, almacenarla, distribuirla o regalarla.
“Estamos hablando de zonas rurales, donde las distancias son largas, no tienen cómo avisarle a los del pueblo que vayan a sus fincas a buscar leche regalada, porque tampoco hay señal de telefonía», dijo.
«En esas localidades desde hace más de 20 días no llega gasolina, así que las plantas están de adorno, porque no pueden prenderlas, se dañó la leche y eso se traduce en más hambre, más escasez y más miseria”, añadió Figueroa.
En el caso de las queseras, la situación es similar, tampoco tienen combustible para mantener operativas sus plantas y poder procesar la leche, razón por la que, aunque algunos productores logran llevarla, no la aceptan por no poder hacer nada con ella.
“Estamos en las manos de Dios, más nada. Los militares encargados del tema del combustible no dan razón sobre las ayudas que pedimos para los productores», señaló.
«Ya en la zona norte es una tragedia y en la zona sur, aunque llegó la luz, fue tan solo por una o dos horas, eso no sirve para nada, porque igual no se cumple con la cadena de refrigeración necesaria”, explicó el presidente de Asogata.
Indicó que ya los ganaderos han optado por secar las vacas para no ordeñarlas, pues la leche, después de 24 horas sin consumir o procesar, ya no es apta para el consumo humano.
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