Madrid.- La Uefa decidió que San Petersburgo no acoja la próxima final de la Liga de Campeones el 28 de mayo tras la invasión de Ucrania por parte de Rusia y el encuentro se jugará en París en el estadio de Francia en Saint-Denis, a las 21.00 horas.
El Comité Ejecutivo del organismo, convocado ayer de manera urgente tras la incursión militar rusa en territorio de Ucrania y «la grave escalada de la situación de seguridad en Europa», comunicó esta medida después de condenar enérgicamente la acción del ejército de ruso.
El Ejecutivo, del que forman parte entre otros el presidente de la Federación Rusa, Alexander Dyukov, y el de la Ucraniana, Andrii Pavelko, también decidió que los clubes y las selecciones nacionales rusas y ucranianas que compiten en competiciones de la Uefa deberán jugar sus partidos en casa en sedes neutrales hasta nuevo aviso.
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En un comunicado, la Uefa mostró su agradecimiento y reconocimiento al presidente de la República Francesa, Emmanuel Macron, por su apoyo personal y su compromiso para que el partido más prestigioso del fútbol de clubes europeo se traslade a Francia en un momento de crisis sin precedentes.
«Junto con el gobierno francés, la Uefa apoyará plenamente los esfuerzos de las múltiples partes interesadas para garantizar la provisión de rescate para los jugadores de fútbol y sus familias en Ucrania, que se enfrentan a un terrible sufrimiento humano, destrucción y desplazamiento», añadió.
El cambio de sede de la final de la Liga de Campeones es el tercero que la Uefa decide de forma consecutiva, después de los de las temporadas anteriores por la pandemia.
En la temporada 2019-20, en la que el título se iba a definir en Estambul, se disputaron a partido único los encuentros desde cuartos de final en Portugal y la final se jugó en la Luz con victoria del Bayern Múnich sobre el PSG.