Pekín.- La selección Argentina de baloncesto masculino firmó su pase a cuartos de final del mundial de China a costa de una Venezuela que llegaba a segunda ronda por primera vez en la historia y que, con esta derrota (87-67), la vinotinto quedó sin opciones de avanzar.
Los argentinos no dieron opciones a su rival y, aunque en ocasiones se atascaron en su juego, fueron un mazo constante con Luis Scola (15 puntos, 6 rebotes) y un imparable Gabriel Deck que anotó 25 puntos y capturó 4 rebotes.
El marcador cayó del lado albiceleste desde el principio, aunque la vinotinto consiguió colocarse unos segundos por delante (2-4) con una canasta de Dwight Lewis Padrón.
Néstor Colmenares cometió un par de errores impropios, que Argentina aprovechó y, aunque Venezuela se esforzó en defensa, el combinado dirigido por Sergio Hernández llevaba peligro en cada acción, ora desde el perímetro, ora bajo el aro.
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A cinco minutos del final del primer cuarto, Facu Campazzo dio el susto y se retiró cojeando al banquillo. Nicolás Laprovittola le sustituyó. Una Venezuela sin centímetros ni pívots puros se las veía dura para contener a Scola y Patricio Garino en la pintura.
Un tiro lejano de Zamora acercó a los venezolanos al término del último cuarto, momento en el que volvió a pista Campazzo, aparentemente recuperado, hecho que certificó con un triple sobre la bocina para cerrar el cuarto con 17-12.
Al comienzo del segundo cuarto, los argentinos pusieron tierra de por medio y, al minuto y medio de juego, ya habían alcanzado los diez puntos de diferencia por primera vez (22-12).
La anotación venezolana, llegó, por primera vez en el torneo, más desde la pintura que desde el perímetro, hasta que Heissler Guillent decidió retomar viejas prácticas y ‘enchufó’ un triple lejano, al que le siguió otro de Luis Bethelmy (27-20).
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Al final del periodo, Argentina parecía tener el control completo del partido, ante una Venezuela que daba muestras de abatimiento ante una momentánea falta de acierto. Los equipos se fueron al descanso con un 38-25 en el electrónico.
Campazzo dejó claro desde la reaunudación que quería matar el partido cuanto antes, y encestó un triple en la primera jugada, al que inmediatamente después respondió Gregory Vargas. Pero la siguiente jugada fue también de tres para la albiceleste: un dos más uno de Gabriel Deck.
El venezolano MIchael Carrera, muy activo, aportó en ambos lados de la cancha, pero mediado el cuarto Argentina ya acariciaba los 20 puntos de ventaja (52-34, logrado con un alley-oop de Delia) y las sonrisas de sus jugadores contrastaban con las muecas de preocupación de sus rivales.
Carrera (19 puntos y 4 rebotes) siguió inspirado y acercó a los suyos con dos jugadas seguidas de canasta y tiro adicional, hasta el 56-42, y fue de lejos el mejor del tercer cuarto, que terminó 63-47.
Los de Fernando Duró no se dieron por vencidos y el último cuarto lo abrió Guillent con un triple, para acercar por 13 a los suyos. Una rareza, ya que la defensa argentina no permitió triples cómodos a sus adversarios, bloqueando así, su recurso anotador habitual.
A fin de contener las cada vez más habituales penetraciones venezolanas, el técnico argentino optó por devolver al veterano Scola (39 años), a la cancha, cuya actuación sirvió para poner diferencia de 20 puntos sobre la vinotinto, terminando el partido 87-67.
