Caracas.- Pareciera que en Venezuela no se celebra el Día Mundial del Teatro. Después del segundo apagón general que sufre el país en el mes de marzo y los decretos de suspensión de clases escolares y trabajos, han convertido a la capital en una especie de pueblo fantasma cuyos habitantes recorren en búsqueda de señal, wi-fi gratuito y ventas de víveres con punto de venta funcional.
Pareciera también que la cultura entra en pausa de nuevo. Sin embargo, los grupos teatrales demuestran lo contrario. Cinco voces del teatro en Venezuela dan fe de que, con o sin luz, el show debe continuar.
Sin luz no hay cultura
Para Daniel Dannery, el truco es saber «torear» el apagón. El director escénico tiene a su cargo tres proyectos en curso: «Tania en 5 movimientos», «Kassandra» y «El pequeño Poni», que han visto afectadas sus temporadas y presentaciones privadas.
La temporada de «Tania en 5 movimientos» se ha visto interrumpida durante casi un mes. El monólogo que protagoniza Tania Sarabia con el acompañamiento de Carlitos Jorgez podría reanudar su temporada esta semana, siempre dependiendo de que haya luz o no.
La planta eléctrica de Trasnocho Cultural no surte de energía ni a la sala italiana (la principal, con un aforo de 310 butacas) ni al Espacio Plural (con una capacidad de 100 puestos). Uno de los trabajadores del centro cultural confirmó a Trasnocho que una falla eléctrica mayor ha impedido que se retome la programación del Espacio Plural, lugar en el que realizaba el 5° Festival de Jóvenes directores.
En el caso de «Kassandra» el escenario es un poco menos complejo porque se trata de un espectáculo que no se vale de una gran escenografía ni una mayor producción para poder presentarse. Para este proyecto, el equipo de producción de Dannery ha optado por venta de taquilla para funciones privadas. La agenda de presentaciones, sin embargo, se ha visto afectada por los cortes eléctricos.
A pesar de esto, Dannery se afirma en la necesidad de aprovechar cualquier oportunidad para presentar sus espectáculos. «Si hay luz, nos presentamos en el espacio que sea, siempre que las condiciones no dañen el espectáculo. Aunque entiendo que debe haber una paralización de la actividad cultural. Sin luz no hacemos nada», explicó.
Ensayar en la oscuridad
«Nosotros somos así. Esto no nos va a parar», afirmó convencido Juan Carlos Ogando, actor y fundador del grupo teatral Skena con Basilio Álvarez. Este año, la agrupación llega a su 40° aniversario y se encuentra en la preparación de los espectáculos cuyo estreno está previsto para el último trimestre del año.
Actualmente, Skena ensaya «El tratamiento», obra que estrena el 26 de abril bajo la dirección de Armando Álvarez. Como la mayor parte de quienes integran el equipo posee trabajo fijo, el horario nocturno era el acordado para ensayar. Ahora, con el apagón, han tenido que suspender algunos ensayos. También han ensayado a la luz de las velas y linternas.
Ogando también protagoniza con Ana Freitas, la obra «El pequeño poni», del dramaturgo español Paco Bezerra y dirigida por Daniel Dannery. La obra, estrenada en el Espacio Plural de Trasnocho Cultural durante el año pasado, se mantiene vigente gracias a presentaciones privadas y presentaciones en instituciones escolares que han tenido que posponerse a causa del apagón.
Como vaya viniendo, vamos viendo
La caja de fósforos, teatro ubicado al final de la calle Caurimare de Bello Monte, no dispone de planta eléctrica. La contingencia eléctrica tomó por sorpresa al centro cultural en medio de la segunda edición del festival de dramaturgia europea, que lleva por nombre Estación Europa. El primer apagón del mes ocurrido el 7 de marzo ocasionó que los organizadores del festival pospusieran su estreno dos semanas.
Ahora se encuentran en vilo las presentaciones de «La repetición» e «Hilda», así como los ensayos de «7 minutos», «Una vida americana» (bajo la dirección de Elvis Chaveinte) y «Tribus» (al mando de Rossana Hernández). Gonzalo Irigoyen, quien se destaca como asistente de dirección de Diana Volpe en la pieza «7 minutos» y cuyo estreno está agendado para el 19 de abril, explicó que la misma estructura del teatro permite que los ensayos puedan realizarse durante el día con luz natural en el horario comprendido entre las 10:00 am y las 3:00 pm.
La falla eléctrica también hace difícil conseguir dinero en efectivo para abordar alguna de las escasas unidades de transporte público, complicando el traslado de actores, asistentes y productores el traslado hacia La caja de fósforos para cumplir con los ensayos. A tal fin, la coordinación del festival ha organizado equipos donde quienes disponen de transporte particular apoyan a aquellos que no disponen de medios para trasladarse.
El Grupo Actoral 80, a cargo de Héctor Manrique, ensaya actualmente «Art» de Yasmina Reza al aire libre, preferiblemente en horario vespertino antes del anochecer o en la mañana. Sócrates Serrano, quien forma parte del elenco, explicó que tanto él como Manrique han prestado apoyo y se han organizado para trasladar a los otros integrantes del equipo cuando el transporte público dificultan asistir al lugar de ensayo.
El actor cuenta que el apagón del pasado 7 de marzo lo tomó en pleno ensayo de «Terror», obra donde también participa y cuyo estreno finalmente pudo realizarse el pasado sábado. «Las grandes crisis de estos episodios te dan norte y foco a pesar de lo difícil que sea concentrarse. Tener un norte y un objetivo, sobre todo cuando se trata de la cultura permite que mantengas tu cabeza enfocada en un trabajo que el público agradece», explicó convencido.
Suspender: la última opción
El actor y director Guillermo Díaz Yuma explicó a sus alumnos que «el teatro es todavía más necesario en la guerra». Esta es la razón por la cual en el Centro de Creación Artística TET, con sede en el teatro Luis Peraza, se ha intentado recurrir a la suspensión de actividades lo menos posible. En la sala actualmente se presentan obras como «Las mil y tantas noches», una experiencia radioteatral ideada y dirigida por Carlos Sánchez Torrealba y «El padre de todos nosotros» bajo la dirección de Díaz Yuma.
En el teatro también se mantiene el taller de canto a cargo de Domingo Balducci, el taller de teatro infantil y se ensaya el proyecto «Germinados», con el cual culmina el taller-montaje de formación teatral.
El TET no cuenta con planta eléctrica activa. Sara Azócar Azpiri, actriz de «El padre de todos nosotros» e integrante activa de la agrupación, afirmó que el trabajo se mantiene aún sin luz, siempre buscando áreas con acceso a luz natural. «A veces la luz se va de camino al teatro o se va allí y vuelve, es un vaivén», explicó.
Con respecto al transporte, Azócar y sus compañeros han logrado recurrir al transporte público. Cuando no es posible, han conseguido colas. Y cuando todo falla, han caminado. En el caso particular de Azócar, quien vive en San Antonio de los Altos, ha tenido que mudarse temporalmente a la capital para poder estar más cerca y lograr «atajar» la luz para organizar ensayos y ensayar. «En general, no hay jornada completa suspendida, salvo momentos específicos que se vuelven imposibles y la situación sale de nuestras manos», resumió.