Mejor película, Mejor dirección y Mejor guión original. Con su testamento vital «Dolor y gloria», Pedro Almodóvar alcanzó el séptimo cielo este sábado 25 de enero en España, en la gala de los Goya, que también coronaron como Mejor actor a su alter ego, Antonio Banderas.
«Yo no concibo la vida sin seguir rodando», dijo un entregado Almodóvar, que a través de la actuación de Banderas, y con Penélope Cruz de madre, desnuda su sufrimiento, su arte y su infancia en «Dolor y gloria«, merecedora en total de siete goyas.
«Tú me has entendido mejor que nadie», le dijo poco antes, igual de emocionado, un Antonio Banderas que ha trabajado en ocho producciones de Almodóvar y consiguió en su Málaga natal su primer Goya a Mejor actor.
La noche fue redonda para el aclamado director manchego, que irá a los Óscar el 9 de febrero, con dos nominaciones: Mejor película internacional y Mejor actor, para Banderas.
Es la cuarta vez que una película dirigida por Almodóvar gana el Goya a la Mejor cinta y la tercera ocasión en que él se impone como Mejor director. La última vez fue en 2006 con «Volver».
En la categoría de Mejor película iberoamericana se consolidó aún más el dominio argentino con el triunfo de «La odisea de los giles», una tragicómica cinta de Sebastián Borensztein sobre el corralito argentino de 2001. En total, Argentina ha ganado en 18 de 33 ocasiones en esta categoría.
A la gala del cine español que tuvo lugar en el palacio de deportes Martín Carpena de Málaga, asistió el presidente del gobierno, Pedro Sánchez.
La Academia española de Cine dedicó el Goya de Honor a la actriz y cantante Pepa Flores, más conocida como Marisol, ícono del cine español de los años 60 («Marisol rumbo a Río», «Cabriola», etc) y retirada desde hace tres décadas. El galardón fue recogido por sus tres hijas.
