Una selección inédita de dibujos, maquetas y esculturas del artista venezolano Alejandro Otero (1921-1990) será expuesta este sábado 22 de febrero en la galería Odalys de Madrid, como parte del inicio de las celebraciones por el centenario de su nacimiento.
La muestra Otero, monumental recoge parte de su trabajo realizado entre 1969 y 1987, cuando realizó su investigación acerca del color, el movimiento, el agua, la luz y el arte en el Instituto Tecnológico de Massachussets (MIT), Estados Unidos.
De acuerdo a una de prensa, la exhibición se centrará en sus obras de carácter cívico, o monumental, donde buscó una convergencia entre la ciencia y el arte a través de novedosas formas de expresión plástica, como sus esculturas orbitales a escala urbana. Bajo la curaduría de Adolfo Wilson, dichas obras también sirven como testimonio de las motivaciones, intereses y ambiciones creativas de Alejandro Otero, en el contexto de su investigación.
«Cuando trabajaba en el Centro para Estudios Visuales Avanzados, de MIT, tomé el río Charles como punto de partida para el diseño de algunas esculturas. En el caso específico de éstas a las que me estoy refiriendo, su amplitud frente a la Universidad, la lentitud de su corriente casi paralizada por efecto de un dique, el viento que sopla a menudo violento sobre el agua, la luz del sol a la caída de la tarde y, en gran medida, la contaminación misma del río. Los resultados fueron una familia de criaturas desgreñadas que debían desplazarse enloquecidas por la superficie del agua», comentó Otero en una ocasión respecto a su estancia en el campus universitario.
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La Fundación Otero-Pardo y el Grupo Odalys son los organizadores de la muestra, que estará abierta al público hasta el 25 de abril en 28010 de la calla Orfila 5 de la capital española. Igulamente, también preparan una serie de actividades en el museo homónimo del artista, ubicado en La Rinconada, Caracas.
Alejandro Otero es considerado uno de las prolíficos representantes del arte venezolano del siglo XX junto a Jesús Soto y Carlos Cruz-Diez. Oriundo de El Manteco, estado Bolívar, se convirtió en un exponente mundial dentro del cinetismo y la abstracción geométrica. Se hizo reconocido por su serie de pinturas conocida como Coloritmos, donde buscaba una resonancia entre la línea y el color, su Espejo Solar, en los jardines de la Universidad Simón Bolívar, o sus murales en los edificios de las facultades de Farmacia y Arquitectura de la Universidad Central de Venezuela, además de la famosa fachada de la biblioteca de su Facultad de Ingenería.
A nivel monumental, sin dudas una de sus obras más reconocidas es el Abra Solar, que representó al país en la XL Bienal de Venecia y desde 1983 forma parte de Plaza Venezuela.
