Caracas.- Cultura, periodismo, encuentro. Estas tres palabras servirían para describir la presentación del proyecto Te la cuento yo, en el local Java’s Bar de Bello Monte, en el municipio Baruta, ante los vecinos de la urbanización y con todas las medidas de bioseguridad.
La actividad contó con la participación de Gisela Rodríguez y Yoyiana Ahumada, principales líderes de esta propuesta, y de Alma Ariza, coordinadora del departamento audiovisual de El Pitazo y encargada, con su equipo, de la producción, grabación y edición de cada una de estas historias.
Se trata, pues, de una nueva apuesta de El Pitazo por el periodismo performático, siendo este un instrumento para generar espacios de encuentro y sanación del tejido social. Al presentar la actividad, Yoyiana Ahumada, con una sólida trayectoria en materia de actuación, dirección e investigación en el ámbito teatral, destacó que cuando se le coloca la lupa a un conflicto humano, “se le está hablando a todo un país”.
También describió al proceso de desarrollo de Te la cuento yo. Con el apoyo de Jorge Santiago, líder vecinal de Artigas, se escogieron tres situaciones que afectan en gran medida a los vecinos de la zona, para luego entrevistar a los vecinos que deseaban participar y ofrecerles acompañamiento psicológico (a cargo de la psicóloga Alegría Marcano) y que, de esa forma, pudiesen verbalizar sus angustias de la mejor manera posible. A partir de esta experiencia, Ahumada escribió tres escenas breves, asumiendo también la dirección de las mismas.
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Dicho esto, se proyectaron las historias. La primera, El ángel de Bucaramanga, cuenta la historia de un venezolano, afectado por la crisis económica y la situación de su familia, que decide emigrar a Colombia, siendo allí víctima de toda clase de maltratos y discriminación. El actor Nelson Lehman fue el encargado de prestar su cuerpo para esta historia real, inspirada en un vecino de Artigas.
La segunda fue No llames a las balas. Antonio Delli y Claudia Nieto, primeros actores de la televisión y las tablas venezolanas, le dan vida a un matrimonio de dos hijos, cuyo hogar es destrozado por un incidente terrible cuya causa es la violencia de género. A través de esta obra, los vecinos de Bello Monte pudieron constatar las graves repercusiones del machismo y la violencia contra la mujer.
Por último, Omaira Abinade y Melba González protagonizan Niño Jesús, ven a esta casa, una obra fresca y nostálgica que cuenta, al son de los pregones y con un poco de humor, la vida de dos madres solteras que se plantan de cara al hambre y a la pobreza, y se reinventan constantemente para vender en la calle dulces criollos, de factura artesanal.
