La protesta protagonizada por conductores que permanecían hace cuatro días para surtirse de gasolina en la estación de servicio Texaco, que trancó el paso hacia Puerto Cabello en la autopista El Palito-Muelles a las 6:30 am de este miércoles 30 de septiembre, estuvo precedida por otras manifestaciones públicas de ciudadanos que reclaman al alcalde Juan Carlos Betancourt por el caos de servicios públicos que padecen los porteños.
La protesta matutina en las adyacencias de la bomba Texaco, concluyó al poco tiempo de haberse iniciado. Cuando los militares que custodiaban la estación de servicio anunciaron a los manifestantes que de inmediato empezaría el despacho de combustible cesó el cierre vial.
Apenas horas antes, otra protesta de vecinos de Cumboto II, Las Llaves y zonas adyacentes encendieron cauchos en la autopista Sorpresa-Muelles por el apagón que los afectó desde la noche del martes hasta la madrugada del miércoles.
“Es patética la incapacidad del alcalde Juan Carlos Betancourt, no resuelve ni uno de los problemas del pueblo bajo el argumento de que no son de su responsabilidad sino de Nicolás Maduro”, expresó en tono de frustre Coromoto Medina, una lugareña a quien se le han quemado varios electrodomésticos por los apagones.
Otra protesta por los prolongados cortes eléctricos se produjo la noche del domingo 27 de septiembre en la urbanización Rancho Grande cuando vecinos quemaron un par de cauchos en la avenida Bolívar, que a la media hora funcionarios de la Policía Municipal apagaron.
A la quema de cauchos y los cierres viales se han sumado sendos cacerolazos que desde la semana pasada han realizado vecinos de zonas como La Sorpresa, Santa Cruz, el centro de la ciudad y El Polvorín, entre otros sectores afectados también por la falta crónica de agua y gas.
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Vecinos del centro de la ciudad denunciaron este miércoles a través de la radio que hace mes y medio no reciben agua por tuberías, las bombonas de gas que ya pagaron y las cajas Clap tampoco llegan, indicó Nelson Rivero.
La misma denuncia la formularon desde el barrio San José, la urbanización La Elvira y desde Cumboto II, no tienen agua, gas doméstico, alimentos, falla el servicio eléctrico y además padecen los efectos de la escasez de gasolina.
En las adyacencias del edificio sede de Corpoelec, en Valle Seco, vecinos de Rancho Grande, realizaron el pasado lunes un pancartazo para exigir el cese de los apagones sin previo aviso y prolongados durante horas a diario.
Otra falla en Puerto Cabello es la del alumbrado público. La autopista El Palito-Muelles y la avenida Salom, las principales arterias viales de la ciudad, tienen meses a oscuras, escenario que se repite en no pocos barrios y urbanizaciones, dijo Delio Medina del barrio Bartolomé Salom.
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