Maracay. El abogado José Heli García González cada domingo iba al cementerio La Primavera, ubicado al suroeste de Maracay, para reencontrarse con sus seres queridos. Dejó de ir porque en la última visita lo intentaron atracar a plena luz del día. El sábado 15 de junio decidió volver, bajo todo riesgo, a llevarle flores a su papá a propósito del Día del Padre.
Se encontró con una desagradable sorpresa. «Los cuerpos de mis familiares, de mis abuelos, mis tios y mis padres fueron robados«, contó con dolor el abogado, como si se tratara de una segunda muerte.
En el panteón familiar, ubicado en el cuartel B, linea 38, habían profanado dos fosas de donde sacaron seis cuerpos que habían sido sepultados en los años 1970,1972, 1984, 1994, 2004 y 2014.
«En varias oportunidades han tratado de profanar las tumbas de mi familia. La primera vez, cuando estaba en vida mi papá, nosotros hicimos la denuncia y colocaron a las personas presas de allí del cementerio. Desde que murio mi papá yo iba todos los domingos a vigilar la tumba y a estar un rato allí. Este sábado me dispuse a llevarle algunas flores y a orar con él y cuando me di cuenta las dos tumbas estaban abiertas», relató.
Entre los cuerpos que extrajeron se encuentran los de José Heli García Sánchez (+2004) quien fue presidente del Concejo Municipal de Girardot en 1967, en la época de Raúl Leoni y Ramona Josefina González de García (+2014), ambos padres del denunciante.
«Antes, en el día del padre y el día de la madre, las autoridades municipales limpiaban el cementerio. Ahora es una desidia y un abandono total. El monte llega a un metro, otras tumbas también están abiertas y profanadas. La Primavera era un cementerio icono de la ciudad y se ha convertido en un antro de delincuencia, santeria y brujería«, denunció.
El cementerio, que fue creado en 1915, hace varios años colapsó y dejó de vender parcelas. Algunos museológos lo han considerado como un espacio de gran valor histórico y arquitectónico, por los panteones centenarios, monolitos y esculturas ornamentales de gran valor artístico, que hicieron que en 2006 fuese incluido en el Registro General del Patrimonio Cultural de Venezuela.
Hoy en día el Cementerio La Primavera subsiste en medio de la maleza, el abandono y la inseguridad.