Caracas.- La actriz y cantante venezolana Liliana Morillo reveló una historia importante sobre su vida. Se trata del momento en el que ella dijo «basta» a los abusos que le hacía a su cuerpo y salud. En un relato muy emotivo contó dos anécdotas que le hicieron abrir definitivamente los ojos y darse cuenta de que se estaba «autosaboteando» y lo disfrazaba con su autoestima. «Me estaba ahogando«, relató.
En un video de 35 minutos publicado en su canal Youtube, Liliana desglosó una parte muy dura de su vida, la realidad de que siempre fue gorda y señala que aunque cuando era más joven nunca le importó, llegó un momento en el que tuvo que detenerse a reflexionar porque estaba pesando 217 libras, dormía casi semisentada, le costaba amarrarse los zapatos y con la ronquera su voz era de un 60% y no de 100%. El video forma parte de una lista de reproducción en su canal en el que va contando paso a paso su historia de transformación.
«Una salud en decadencia. El cardiólogo me dijo: ‘si continúas así vas a terminar diabética‘», recordó. Ella dice que no solo el médico la alertaba sobre el peligro que estaba corriendo, también lo hicieron su mamá, la reconocida cantante Lila Morillo; su hermana Lilibeth, también cantante; y su hija de 25 años, quienes constantemente le comentaban que se estaba excediendo con la comida, las bebidas alcohólicas y el cigarrillo.
Agregó que antes de comenzar con la transformación se preguntaba cómo había llegado a donde estaba, no sabía cómo salirse o retroceder. «Alguien que me tirara un salvavidas porque me esta ahogando», recalcó.
Episodios que le abrieron los ojos
Relató que el primero ocurrió en el edificio en el que vive, cuando estaba paseando a su perro y un trabajador con el que ella tiene mucha confianza le dijo: «Tu eres muy bella, pero por qué te pusiste tan gorda?» y ella le contestó que por problemas hormonales, comía mucho y bebía mucho, pero que a pesar de su peso ella se sentía «sabrosa y rica». Pero cuando se dio vuelta se dijo: «Tengo que hacer algo«.
Acepta que su manera ser tan «fuerte, potente e impuesta» no le había dejado ver que aceptarse como es y tener autoestima no es lo mismo que «autosabotearse». En el material audiovisual señala que hizo eso constantemente, ajustar su estilo de vida acorde al peso que iba ganando con los años. «Mi abandono y dejadez, traicionaron a Liliana«, resaltó.
La otra anécdota fue en la celebración de una boda donde la invitaron a cantar, ella se sentía «fabulosa y orgullosa» porque la apludieron con mucho estusiasmo y le gritaban elogios, pero asegura que cuando vio el video se quería morir porque parecía un hipopótamo cantante.
«El video lo borré de mi teléfono, en ese momento dije: llegué, me llevó el río, no puedo estar así, necesito ayuda«, detalló la también hija del cantante venezolano José Luis Rodríguez «El Puma«.
«Me siento mejor que en toda mi vida»
La venezolana destacó que lo que más le costaba hacer era vestirse para trabajar y verse bonita. Comentó que lo más difícil era taparse los brazos. Cuenta que su rebeldía y «sabrosura» llevaba la ropa a agrandar.
Confiesa que después de la operación de manga gástrica a la que se sometió se siente mejor que en toda su vida, afirma que volvió a nacer física y espiritualmente. «Voy viento en popa, esta vez no voy a sabotear a Liliana y voy a hacer todo al pie de la letra. No estoy pasando hambre, me siento mejor que en toda mi vida, nací espiritualmente de nuevo», subrayó.
Contó que tiene buenos hábitos, aborrece el cigarrillo que durante años fumó y que está durmiendo bien. «No puedo creer que me haya saboteado tanto», añadió.
Da un consejo para aquellos personas que luchan con el peso, les dijo que el mejor momento para empezar es el ahora y que no pierdan tiempo. «Piensen en ustedes«, recomendó.